El éxito de la joven que creó "glitter boobs" en Coachella y ahora vende sus obras por Instagram

Sophie Tea es una artista que vende cuadros hasta en 15,000 libras con obras abstractas en un negocio instaurado por Instagram, pero saltó a la fama en 2017 cuando creó el "glitter boobs" y modeló su look en el festival de Coachella.

La venta de sus pinturas funciona a través de un #100DayAbstractChallenge, lo que la ayuda a colocarlas en el mercado a buen precio y volverlas reconocidas a nivel mundial, por lo que espera pronto recaudar hasta en un millón de libras con la venta de sus cuadros.

Pero Sophie no siempre ha sido famosa. En 2016 se graduó de la Licenciatura en Administración de Empresas de la Universidad Aston de Birmingham y en otoño del mismo año se uniría a un programa de egresados como consultora analítica, pero sus planes cambiaron completamente después de viajar a la India donde se dio cuenta que en verdad quería ser artista.

Con 22 años, la rubia se ofreció a pintar un mural en un albergue en la India a cambio de una estadía gratis. Ésta era la primera vez que tomaba los pinceles después de seis años, cuando abandonó el arte al pensar que jamás ganaría dinero.

"Pinté un enorme y colorido mural de vacas cuando son sagrados en la India", declaró para el diario Daily Mail.

Su obra de arte la impulsó a seguir su sueño y abandonar su carrera, siempre con el apoyo de su familia.

"Llamé a mi padre y le dije: '¿te importa si me mudo a casa para convertirme en un artista?' Creo que al principio mis padres se sorprendieron un poco, pero me apoyaron mucho", recordó.

Sophie inició su carrera artística pintando cuadros de las mascotas de su familia y amigos, todos inspirados en el mural de vacas que hizo en la India.

"Alguien me pediría que pintara un perro azul, ese tipo de cosas. Me hice un nombre para pintar estos coloridos animales, porque era un poco un nicho", mencionó al aclarar que aún no estaba convencida de poder ganarse la vida con sus obras de arte.

Su negocio se expandió cuando notó que podía vender sus obras a través de las redes sociales, para todos aquellos no les gusta ingresar a las galerías de arte. Esta forma de comercializar sus pinturas le ahorró dar hasta el 50% de sus ganancias a los centros artísticos.

"Ya estaba construyendo mi negocio a través de las redes sociales, así que simplemente continué allí. Soy capaz de promocionarme más de lo que una galería podría hacerlo a través de las redes sociales. Siempre estoy aumentando gradualmente mis precios y trabajando a capacidad", agregó.

Al mismo tiempo, comenzó sus estudios artísticos en el Wimbledon Art Studio, donde es considerada la estudiante más joven en 10 años.

Fue en 2017 cuando conoció a Jenna Meek, otra joven que buscaba impulsar una marca de joyería corporal llamada Gypsy Shrine y que quería ampliar su mercado en los festivales.

"Mientras estábamos en Coachella, tuvimos la idea de las "glitter boobs". Nos quitamos la parte superior y pusimos un montón de brillo en nuestros senos. En realidad, es un poco embarazoso ahora, pero mis seguidores se dispararon después de eso", dijo la nacida en Manchester.

A partir de entonces sus seguidores en redes sociales crecieron exponencialmente y hasta fue buscada por Ellen Degeneres.

Otro evento que marcó la carrera de Sophie Tea fue el ataque terrorista en el concierto de Ariana Grande en su ciudad natal, cuando decidió a recaudar fondos para apoyar a las víctimas. En esa época pintó un enorme lienzo de abejas de colores y lo subastó en 2.500 libras.

Su diseño de abejas llamó la atención del publicista de Grande, quien le preguntó si podían bordar la abeja en una chaqueta para el cumpleaños de la estrella, lo que le dio más estatus a Sophie.

Su nivel artístico cambió a mediados del año pasado. Modificó las pinturas de animales por el arte abstracto y comenzó el #100DayAbstractChallenge, con el que publica una de sus piezas todos los días a las 20:00 horas durante 100 días y la primera persona en comentarla puede comprarla. Así logró la venta de cada cuadro en 250 libras.

"Obviamente, al principio les envié un mensaje a todos mis amigos para que comentaran sobre las publicaciones para crear un zumbido y una gran tracción. Pero creció tan rápido y tan pronto como estaba vendiendo pinturas en segundos. Gané diez mil seguidores en seis meses", explicó la joven.

El último día de su reto 30 personas comentaron durante los primeros dos segundos de la publicación, así que decidió abrir un enlace, subir los precios y ofrecer la pintura durante 100 horas. Con esto logró que más de 300 personas le compraran sus cuadros.

Hasta el momento ha logrado la venta de más de 1.000 pinturas originales y ya va por el segundo desafío #100DayAbstractChallenge.

Sophie trabaja 15 horas al día 7 días a la semana y termina sus obras dependiendo de su estado de ánimo.

"A veces puedo pintar dos o tres piezas en un día, mientras que otros días puede ser una semana completa", sostuvo.

"Como mujer de negocios tienes que aprovechar todas las oportunidades. La belleza de ser un artista es que podría hacer algo totalmente ridículo un día y luego decir 'Oh, bueno, tenía 22 años' y seguir adelante", sentenció.