Coronavirus: Bogotá salió del alerta roja tras la baja en la ocupación de unidades de terapia intensiva

Bogotá enfrenta el inicio de la “nueva normalidad” habiendo superado el primer pico de la pandemia del coronavirus y así lo demuestras las cifras de ocupación hospitalaria que siguen a la baja, permitiendo, por primera vez en meses, salir del “alerta roja”.

Este miércoles la capital amaneció con una cifra de ocupación de camas UCI de 68,9%, una muy buena noticia ya que desde mediados de junio no bajaba del 70% e incluso llegó a superar el 90% en los momentos más álgidos del pico de contagios.

Actualmente hay 1.280 unidades de UCI que está siendo usadas, de las 1.858 disponibles en la ciudad para atender pacientes Covid-19. La principal ocupación se presenta en los hospitales del sur de la ciudad.

Su bien esta caída en las cifras de ocupación de UCI significan la salida de la alerta roja, la alerta naranja continúa decretada en toda la ciudad, lo que implica no bajar la guardia en ninguna de las recomendaciones y medidas de bioseguridad para el autocuidado y la prevención de nuevos contagios.

Durante septiembre el énfasis del manejo de la pandemia en Bogotá y toda Colombia tuvo un viraje hacia el autocuidado, en una nueva fase denominada “aislamiento selectivo” en el que sólo las personas contagiadas o sospechosas de contagio deberá guardar cuarentena.

En la capital, por ejemplo, se han adoptado algunas medidas particulares para ajustar este aislamiento selectivo al contexto de la ciudad, como por ejemplo el programa “Bogotá a Cielo Abierto”, el cual incentiva a los restaurantes a usar espacios abiertos para la atención de comensales, pues de esta forma se reduce el riesgo de contagio.

Cerca de 48 mil locales gastronómicos se han acogido a estas recomendaciones y están haciendo parte del plan piloto de este programa que empieza a funcionar este jueves y por medio del cual el Distrito dispuso el uso de ciertos espacios públicos como plazas, parques y calles, para que los restaurantes pudieran funcionar.

Esta tendencia a la baja de las cifras de la pandemia implica un especial cuidado y seguimiento a las medidas adoptadas, dicen las autoridades distritales, pues Bogotá sigue reportando importantes cifras en cuanto a los contagios, que rondan los 2 mil casos confirmados diarios.

De acuerdo con el secretario de Salud de Bogotá, en entrevista con Noticias RCN, se espera que entre noviembre y diciembre en la capital se viva un nuevo pico que podría significar pasar una navidad con restricciones.

“Con restricciones por supuesto que sí, esperamos que no sean necesarias las cuarentenas, tenemos la ilusión de que no sea necesario volverlas a tomar, sin embargo, Bogotá todos los días se realizan miles de pruebas y se les ubica dentro de su mapa geográfico”, dijo el secretario.

Agregó que, si bien en este momento la curva empieza a bajar, puede llegar el momento que “vuelva a cambiar la pendiente de la curva, que perdamos el valle y volvamos a empezar”, pero que el enfoque de la ciudad es tratar de no volver a un estado de cuarentena y menos al de una cuarentena general.

Es por eso que la “nueva normalidad” en Bogotá se maneja el concepto de “Cupo epidemiológico”, lo que significa que las directrices de la administración están enfocadas a mantener solo un porcentaje de la población en las calles al tiempo.

Es por esto que se definió un “cronograma de actividades” que puede consultar aquí, en el cual se dispuso de días y horas para que los distintos sectores económicos puedan funcionar.

En el caso de las iglesias y cultos religiosos, los cuales aún están prohibidos en Bogotá, el secretario de Salud dijo que lo más probable es que se permitan volver a funcionar dentro de pocos días, después de evaluar las cifras que deje las medidas adoptadas en la “nueva realidad”.

“Bogotá no puede tener que el 60% de las personas en un momento dado en la calle, haciendo actividades que generen contacto social, por eso hay unas que están unos días, probablemente los cultos religiosos también van a ser autorizados en próximos días, de acuerdo al comportamiento (…) Si los números permanecen constantes, para abrir cultos tendríamos que cerrar otra cosa, porque de eso se trata el concepto de cupo epidemiológico, estamos tomando las medidas con toda responsabilidad”, sostuvo.

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