Lisboa, 10 oct (EFE).- El Gobierno conservador de Portugal espera que la economía del país crezca el 1,8 % este año y el 2,1 % en 2025, por encima de sus anteriores estimaciones, y anticipa un superávit presupuestario del 0,4 % del PIB para este ejercicio.
Estas cifras constan en el escenario macroeconómico del Presupuesto para 2025, presentado este jueves en Lisboa por el ministro de Finanzas luso, Joaquim Miranda Sarmento, que lo definió como "cauteloso y con buenas perspectivas".
"La economía portuguesa tiene condiciones para crecer por encima del 2 % los próximos años", defendió.
En concreto, el Ejecutivo estima un avance del 1,8 % este año y un 2,1 % en 2025, por encima de los números que incluyó en el Programa de Estabilidad que presentó cuando tomó posesión el pasado abril (1,5 % y 1,9 %, respectivamente).
Este optimismo contrasta con las previsiones presentadas un día antes por el Banco de Portugal, que empeoró sus estimaciones y proyecta que el PIB crezca sólo un 1,6 % este año.
La estimación para 2025 es la misma que la del Gobierno (2,1 %).
El Ejecutivo liderado por el primer ministro Luís Montenegro mantiene la tendencia de bajada de la deuda pública: "Es un esfuerzo que el país tiene que seguir haciendo", dijo el titular de Finanzas, que señaló que este indicador debe situarse en torno al 80 % del PIB en 2028.
Tras cerrar 2023 en el 97,9 %, para este año prevé una caída al 95,9 % y que siga bajando hasta el 93,3 % en 2025.
En cuanto al saldo presupuestario, Portugal volverá a registrar superávit en 2024, del 0,4 % del PIB, y se reducirá el próximo año, hasta el 0,3 %.
Aun así, el ministro de Finanzas avisó de que "el país no está actualmente en condiciones de tener superávits muy elevados" y que esas cifras se deben al impacto del plan de recuperación y resiliencia.
El mercado de trabajo se mantendrá estable y la tasa de desempleo, que acabó 2023 en el 6,5 %, subirá ligeramente en el presente ejercicio al 6,6 %, para volver al 6,5 % en 2025.
El Ejecutivo espera "niveles de inflación próximos al 2 %", con el índice armonizado de precios al consumo en el 2,6 % en 2024 y en el 2,3 % en 2025.
El Gobierno está en minoría en el Parlamento y no tiene garantizada la aprobación del Presupuesto, ya que aún no ha alcanzado un acuerdo con el Partido Socialista, líder de la oposición, tras semanas de negociaciones.
Miranda Sarmento afirmó hoy que aguardará a la "discusión política" y apeló a la "responsabilidad" de los partidos para aprobar las cuentas y no alterar el fondo de las medidas para alcanzar un superávit del 0,4 %, como está previsto.
La tramitación parlamentaria del Presupuesto arranca el 30 de octubre y la votación final está prevista para el 28 de noviembre. EFE