Roma, 21 may (EFECOM).- La mayoría de sindicatos de taxistas de Italia hicieron este martes una huelga de protesta de 24 horas contra algunas iniciativas para desregulación del sector y aumentar el número de licencias en algunas de las principales ciudades como Roma o Milán, donde escasean estos servicios.
El paro laboral fue convocado entre las 8:00 de la mañana (6:00 GMT) las 22:00 (20:00 GMT) y congregó a gran parte de sindicatos de taxistas, movilizados "para contrarrestar el uso ilegítimo de los permisos de alquiler de los llamados vehículos con conductor" y "salvaguardar su autonomía e independencia de la esclavitud de algoritmos y multinacionales", según declararon en un comunicado difundido por prensa local.
Asociaciones de consumidores y usuarios tacharon la huelga de "inútil" y la consideraron una protesta corporativa "para mantener los privilegios de casta de los taxistas", mientras éstos piden que una serie de normativas para proteger el sector de la desregulación.
"La nuestra no es ni debe parecer una defensa corporativa, saldremos a la calle también para proteger a los usuarios", declaró Alessandro Genovese, director de taxistas de la Unión General del Trabajo (UGL, por sus siglas en italiano).
Según alegó, los usuarios tienen tarifas reguladas y certificadas cuando usan taxis, pero en un contexto de crecimiento de la demanda, los servicios que funcionarán a través de multinacionales como Uber y a base de algoritmos "se dispararán", lo que creará "una situación de emergencia o desastre" para los precios, que subieron ya un 400 %.
"La desregulación está a la vista de todos", remarcó Genovese, que lo achacó "a las multinacionales que operan en grandes ciudades".
En Roma se convocó la protesta central de la jornada de huelga, y también se registró un seguimiento importante en Turín o Milán.
Los taxistas se quejaron de la inacción para resolver el problema por parte de la coalición gubernamental de Giorgia Meloni.
Otro representante sindical, Riccardo Cacchine, mostró "alarma" y denunció "la injerencia que Uber ha impuesto en la política".
El ministro de Transporte, Matteo Salvini, dijo que su prioridad es "crear puestos de trabajo y poner fin a la competencia perenne que a veces termina en peleas entre taxistas y empresas" varias que ofrecen sus servicios de conducción a los clientes por otras vías. EFECOM
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