Madrid, 9 may (EFE).- El Alto Representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, reconoció este jueves que "Europa no tiene hoy la capacidad que debería tener para influir" en la guerra de Gaza y en la respuesta que Israel está dando a los atentados de Hamás del pasado 7 de octubre.
Borrell se manifestó de esta manera en la presentación de su libro "Europa entre dos guerras" en la sede de la Comisión Europea en Madrid, organizada por la asociación Economistas Frente a la Crisis y moderada por la politóloga Cristina Monge.
En el acto, hizo un repaso del pasado año en la política regional y sus funciones en el cargo y se centró en las guerras de Ucrania y Gaza como los dos grandes elementos de preocupación en la acción exterior de la UE.
Sobre la de Gaza asumió que la UE "no tiene la capacidad de influir" aunque sí "los medios", pero a pesar de ello "no existe voluntad política de utilizarlos".
Borrell subrayó que "hay que seguir haciendo presión diplomática hacia Israel" para que al menos "no se produzcan tantas muertes de civiles" aunque reconoció que "esto es un discurso de cuidados paliativos".
En esa línea, aseguró que la "comunidad internacional está en un lugar difícil" y consideró que un posible reconocimiento del estado palestino por parte de algunos países europeos será "criticado" por los que están en contra de esta opción unilateral.
Estimó que una conferencia internacional en la que Israel y Palestina pudieran sentarse a negociar "ayudaría" a la resolución del conflicto a largo plazo.
"Porque Israel dice lo que no quiere, pero no dice lo que quiere, seguramente porque no lo puede decir, pero lo que sucede es la repetición sistemática de la misma tragedia, por lo que comprendo que la indignación moral en parte de mundo sea mayor. Hay cosas que claman al cielo", declaró.
A su juicio, la guerra en Gaza está causando "un gran divorcio entre Occidente y los países árabes, donde el gran ganador es Putin".
"La gran cuestión es quién puede ejercer presión sobre Israel que conduzca a un alto al fuego, básicamente Estados Unidos, que lo ha intentado sin llegar a tomar medidas. Hemos visto que Biden empieza a razonar en esta dirección pero estamos lejos de que Israel no pueda hacer lo que hace por falta de medios y esto causa un divorcio tremendo entre el mundo árabe y Occidente en el que Putin es el gran ganador", insistió.
Sobre la guerra de Ucrania, Borrell asumió que "va a continuar" y "no va a parar en el corto plazo" ya que "Rusia sigue teniendo el mismo objetivo que tenía: "cambiar la situación de Ucrania, castigar a los fascistas de Kiev y sustituir al Gobierno de Zelenski por algo parecido a lo que hay en Bielorrusia".
"El objetivo es que Ucrania pueda seguir resistiendo y va a depender de nuestra capacidad de ayudarles (...) hay que seguir apoyando, la pregunta es ¿hasta cuándo y para qué? quizá en algún momento les diremos que se rindan, no creo que sea una solución política factible y espero que no llegue, pero nos va a poner a prueba la paciencia", añadió. EFE
msh/vh
