Cuba cerró 2023 con una mortalidad infantil de 7,1 por cada 1.000 nacidos vivos

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La Habana, 3 ene (EFE).- Cuba cerró 2023 con un ligero descenso de la mortalidad infantil al registrar 7,1 por cada 1.000 nacidos vivos frente a los 7,5 reportados el año previo, informaron este miércoles las autoridades sanitarias.

La cifra representa 74 fallecidos menos que en 2022 cuando se reportó una tasa de 7,5, indicó el Ministerio de Salud Pública (Minsap).

Las provincias con las mayores tasas son La Habana (7,9), Santiago de Cuba (8), Guantánamo (9) y Mayabeque (9,1), acorde con los datos oficiales.

Los reportes más bajos correspondieron a Pinar del Río (3,1), Artemisa (3,9), Holguín (4,7), Sancti Spíritus (4,8), Villa Clara (5,7) y Matanzas (6,9).

Cuba ha mantenido durante años una de las tasas más bajas de mortalidad infantil en el continente americano que en 2017 y 2018 fueron de 4,0; en 2019 llegó a 5,0; en 2020 a 4,9, y en los últimos dos ejercicios reportó 7,6 y 7,5.

Las cifras de natalidad siguieron cayendo en 2023 en la isla, donde nacieron vivos 90.374 frente a los 95.402 bebés que lo hicieron en 2022, lo que refuerza la tendencia al envejecimiento poblacional y la previsión de que será uno de los países con mayor número de adultos mayores para 2050.

Las cifras hasta 2021 han revelado que el grado de envejecimiento es del 21,6 %, la tasa de natalidad es 8.9 por cada 1.000 habitantes y los valores de fecundidad alcanzaron su menor número en los últimos 60 años, de acuerdo con datos del Centro de Estudios de Población y Desarrollo.