MINNEAPOLIS (AP) — Los Mellizos de Minnesota superaron su sobresalto inicial ante el temor de que su torpedero estelar Carlos Correa hubiera sufrido una fractura en el dedo medio de la mano derecha debido al lanzamiento que lo impactó en el juego anterior.
El viernes quedó confirmado, tras un examen con tomografía computarizada, que el puertorriqueño no sufrió fractura, dijo el presidente de operaciones de béisbol, Derek Falvey. Correa sólo presentó un moretón y dolor.
“Gracias, Señor”, tuiteó Correa.
La condición física del pelotero será evaluada todos los días y no será necesario que se le incluya en la lista de lesionados.
“Lo cierto es que sólo se tratará de controlarle la inflamación y el dolor”, declaró Falvey.
Por ahora, el prospecto destacado Royce Lewis reemplazará a Correa. Lewis fue convocado del equipo de St. Paul de la Triple A para que se estrene en las Grandes Ligas y ocupe el lugar en el plantel del jugador de cuadro venezolano Luis Arráez, quien se encuentra en la lista de inactivos por COVID-19.
Correa fue golpeado dos veces con lanzamientos el jueves, en la derrota de Minnesota en la casa de Baltimore. La primera vez ocurrió en la quinta entrada: la pelota le dio en un antebrazo y en el trayecto se le impactó en el hombro derecho.
La segunda, en el octavo inning, le pegó en la mano derecha a medio swing cuando sujetaba el mango del bate, pero la pelota salió como un roletazo débil hacia territorio válido y el jugador fue puesto out fácilmente.
Tras un lento inicio en el plato en su primera campaña con los Mellizos, Correa acumulaba un promedio de bateo de .412 (de 34-14) y ocho producidas en sus últimos ocho encuentros.
Después de firmar un contrato de tres campañas y 105,3 millones de dólares con los Mellizos, que incluye una cláusula de salida al término de esta temporada y la siguiente, Correa ejerció un liderazgo inmediato y se convirtió en un campocorto sólido, posición en la que ganó el Premio Guante de Oro de la Liga Americana en 2021.
Los Mellizos, que aventajaban dos juegos y medio a Cleveland en la División Central de la Liga Americana antes del partido del viernes contra Oakland, tuvieron varias bajas esta semana.
El piloto Rocco Baldelli, Arráez y el abridor Dylan Bundy quedaron marginados porque el jueves dieron positivo al COVID-19. Todos tenían síntomas leves. El coach de banca, Jayce Tingler, sustituirá temporalmente a Baldelli como piloto.
Falvey hizo declaraciones a la prensa en una videoconferencia porque él también tenía COVID-19.
El primera base dominicano Miguel Sanó está fuera indefinidamente debido a que lo operarán para repararle un menisco desgarrado en la rodilla izquierda.
Sanó se lesionó cuando celebró mediante saltos la victoria en la que el equipó dejó sembrados a los Tigres el 26 de abril y el problema se le agravó cuando intentó jugar el sábado con todo y la molestia en la visita a Tampa Bay.
Otra baja sensible en la alineación es la del jardinero izquierdo Alex Kirilloff, quien ha estado inactivo el último mes debido a una inflamación en la muñeca derecha.
Últimas Noticias
La actividad física emerge como una herramienta "clave" en prevención, tratamiento y abordaje de enfermedades
Expertos reunidos en una jornada sobre Medicina Personalizada de Precisión alertan sobre el impacto del ejercicio regular en la reducción considerable de riesgos asociados a cáncer, patologías cardiovasculares y enfermedades mentales, al tiempo que destacan avances frente a infecciones resistentes

Turquía protesta ante Ucrania y Rusia por los ataques contra embarcaciones frente a sus costas en el mar Negro
Autoridades turcas convocaron a representantes diplomáticos de Kiev y Moscú tras incidentes recientes con barcos en aguas cercanas, expresando su preocupación por el aumento de enfrentamientos y el impacto que estos sucesos tienen sobre la seguridad regional

Gobierno venezolano augura una "gran victoria" frente a las "amenazas" de Estados Unidos
'The New York Times' demanda al Pentágono por las nuevas restricciones a la prensa
La acción judicial del prestigioso diario estadounidense desafía los límites impuestos a corresponsales por el Departamento de Defensa, generando debate sobre el equilibrio entre protección de información sensible y el derecho fundamental al libre ejercicio periodístico en Estados Unidos
