El Team New Zealand conquistó el miércoles la 36ª edición de la Copa América, conservando el mítico aguamanil de plata tras conseguir su séptima victoria, decisiva, ante el equipo italiano Luna Rossa en Auckland.
Tras perder inicialmente 3-2, el equipo Kiwi encadenó cinco victorias seguidas desde el sábado para imponerse 7-3 y ofrecer a Nueva Zelanda un cuarto trofeo en una de las competiciones deportivas más antiguas del mundo.
El Team New Zealand ofrece al archipiélago un cuarto título, tras los triunfos en 1995, 2000 y 2017, en una de las competiciones más antiguas del mundo, una institución que festeja en esta edición sus 170 años.
"Es totalmente irreal, es una satisfacción inmensa para el equipo", dijo después de la victoria el patrón del equipo neozelandés, Peter Burling.
Los neozelandeses esperaban terminar el martes la competición pero un cambio en la dirección del viento llevó a los organizadores a aplazar la 10ª carrera un día.
El miércoles, Luna Rossa en ningún momento pareció representar un peligro para la supremacía neozelandesa, y el Team New Zealand cruzó la línea de llegada con 46 segundos de ventaja, haciendo desatar la alegría en una ciudad salida del confinamiento ligado al coronavirus hace solo once días.
La primera ministra neozelandesa felicitó a sus compatriotas que son, por detrás de Estados Unidos, que reinaron en la competición entre 1851 y 1983, el segundo país con más títulos en esta prestigiosa prueba, con sus cuatro victorias.
"Team New Zealand nos hace sentirnos de nuevo muy orgullosos, convirtiendo la Copa América en la copa de Nueva Zelanda", declaró Jacinda Ardern en un comunicado.
- Orgullo de Luna Rossa -
La sexta campaña italiana termina de nuevo con amargura para Luna Rossa, que había ganado en febrero la Prada Cup -clasificatoria para la Copa América- frente a los desafíos británico y estadounidense.
"No se ha terminado", declaró el cotimonel italiano Francesco Bruni. "Estoy seguro que Luna Rossa lo intentará de nuevo", añadió.
El desafío italiano habrá al menos logrado que no cumplieran algunos pronósticos que anunciaban un 7-0 apara los neozelandeses.
Habrían podido incluso amenazar un poco más a los Kiwis sin algunos errores tácticos fatales en varios momentos claves de las cinco últimas mangas.
El otro cotimonel de Luna Rossa, el australiano Jimmy Spithill, que había torpedeado las esperanzas neozelandesas en la Copa América ganada 9-8 por Oracle en 2013, juzgó la victoria "merecida" para Team New Zealand.
"Claro que iremos a beber una cerveza con los Kiwis para rendirles homenaje", dijo el regatista nacido en Sídney.
La primera ministra Ardern anunció que su gobierno desbloqueará cinco millones de dólares neozelandeses (3,6 millones de dólares estadounidenses) para permitir a Team New Zealand defender la Copa América en su próxima edición, esperada en 2024.
El objetivo será ante todo evitar que se marchen sus mejores elementos hacia desafíos extranjeros con presupuestos más potentes.
Ahora habrá que esperar a conocer el formato de la próxima edición.
Como defensores del título, los Kiwis podrán elegir reglas y lugar. Ya han hecho saber que estudiarían las candidaturas de ciudades extranjeras para albergar regatas.
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