El estado de Michigan pagará 600 millones de dólares por contaminación en Flint

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Durante más de un año los residentes de Michigan debieron beber y cocinar con agua embotellada, un producto que fue distribuido por el estado. EFE/Thais Llorca/Archivo
Durante más de un año los residentes de Michigan debieron beber y cocinar con agua embotellada, un producto que fue distribuido por el estado. EFE/Thais Llorca/Archivo

Chicago (EE.UU.), 20 ago (EFE).- El estado de Michigan anunció este jueves que pagará 600 millones de dólares de compensación a los habitantes de la ciudad de Flint que hayan sido afectados por la contaminación con plomo del agua potable, un escándalo destapado hace seis años.
El monto es resultado de un acuerdo judicial e irá en su mayoría a un gran número de afroamericanos que son residentes en las zonas de bajos recursos de esta ciudad de 100.000 habitantes y ubicada 120 kilómetros al norte de Detroit, principal ciudad del estado.
Pero también se podrían beneficiar al menos un millar de indocumentados, en su mayoría mexicanos, que viven en el área y también fueron afectados.
Según un comunicado de la gobernadora Gretchen Whitmer y de la procuradora estatal de justicia, Dana Nessel, el acuerdo fue negociado durante más de 18 meses con los abogados de miles de residentes que demandaron al estado en 2015.
Whitmer declaró que la compensación puede no ser suficiente para mucha gente, "justificadamente frustrada", con la forma como fue abordado el problema.
"La curación de Flint llevará mucho tiempo, pero nuestros esfuerzos continuos y el anuncio del acuerdo de hoy son pasos importantes para ayudarnos a todos a avanzar", expresó.
La crisis comenzó en 2014, cuando la ciudad dejó de recibir agua del sistema de distribución de Detroit y comenzó a abastecerse en el contaminado río Flint como medida para ahorrar gasto público y mientras se construía una cañería hasta el lago Huron.
El agua del río Flint, conocida tradicionalmente por los vecinos por su suciedad, no pasó por los tratamientos de depuración pertinentes, y sus propiedades corrosivas permitieron que se filtraran grandes cantidades de plomo de las viejas cañerías por las que circulaba.
Al detectarse altos niveles de plomo en los niños de las escuelas de Flint, la ciudad volvió a cambiar a su proveedor de agua potable por el sistema de Detroit, pero según los expertos el daño causado a las cañerías permitió que el plomo se siguiera filtrando en el agua.
Durante más de un año, los residentes debieron beber y cocinar con agua embotellada, un producto que fue distribuido por el estado, que tuvo dificultades para hacer entregas a las familias de indocumentados, temerosas de su estatus y de posibles redadas de inmigración.
La procuradora Nessel informó que el acuerdo buscará beneficiar a los niños afectados, a quienes los exámenes médicos encontraron niveles elevados de plomo en su sangre.
Un nivel elevado de plomo en la sangre puede causar problemas de aprendizaje en los niños y enfermedades renales en los adultos.
Según el acuerdo, el estado establecerá un fondo de 600 millones de dólares y los residentes de Flint pueden presentar reclamos de compensación, que serán aprobados según la gravedad de la contaminación en sus organismos.
Un 80 % de los recursos serán destinados a quienes tenían menos de 18 años cuando Flint usaba el agua del río para consumo, dijo Nessel.
"Este acuerdo se enfoca en los niños y en el futuro de Flint", señaló la procuradora.