Los resultados definitivos y oficiales de las elecciones legislativas del 2 de marzo, comunicados el miércoles por la comisión electoral, confirman un ligero avance del primer ministro saliente de derecha Benjamin Netanyahu, que necesita sin embargo otros tres diputados para formar gobierno.
Netanyahu y su rival centrista Benny Gantz están negociando con los demás partidos para buscar apoyos porque ninguno de los dos obtuvo los 61 parlamentarios necesarios para formar gobierno.
El presidente Reuven Rivlin tiene hasta el 17 de marzo para designar a la persona encargada de formar gobierno.
El Likud de Netanyahu obtuvo 29,46% de los votos, lo que se traduce en 36 escaños en el parlamento.
Junto a sus aliados, los partidos ultraortodoxos Shass et y Judaísmo Unificado de la Torá (nueve y siete escaños), y Yamina (derecha radical, seis escaños), el bloque de derecha obtiene 58 escaños.
Por eso este bloque necesita tres escaños para poder formar un gobierno e intenta convencer a diputados del campo rival.
Por su parte el partido Azul-Blanco de Benny Gantz obtuvo un 26,59% de los votos, es decir 33 escaños.
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