"No es casualidad que un jesuita latinoamericano quiera recibir y escuchar a los pueblos originarios", subrayó hoy en un comunicado Pérez Esquivel, al elogiar al papa Francisco, que lo recibirá junto a Díaz y Amanda Asijak, la esposa del cacique qom.
El ganador del Premio Nobel de La Paz en 1980 anticipó que la pareja conversará con el Papa "las graves violaciones a los derechos humanos que sufren los pueblos originarios en el continente latinoamericano".
"La Iglesia católica ha tenido un rol activo en la conquista de América y gran parte de complicidad con el genocidio de los pueblos originarios, esto es una parte de la memoria histórica de nuestros pueblos que no olvidaremos", analizó el titular de la ONG Servicio Paz y Justicia, aunque aclaró: "También hubo muchos sacerdotes y órdenes religiosas que se pusieron del lado de los pueblos indígenas frente a la opresión".
Díaz hasta ahora no obtuvo respuesta a su pedido de audiencia con la Presidente, que es ratificado cada miércoles por los qom frente a la Casa Rosada. Por eso, el encuentro con el Papa adquiere otra dimensión.
Hace unos diez días, el presidente del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), Daniel Fernández, afirmó que a Díaz "lo usan grandes grupos mediáticos". El cacique no tardó en responder. "El Estado debe garantizar nuestros derechos. No queremos que el Gobierno nos considere como opositores, sino como indígenas. Queremos ser escuchados", señaló.
Entre los hechos que denunciará Díaz ante el Sumo Pontífice se encuentra la muerte de un aborigen de la etnia qom en Chaco durante una protesta en reclamo de tierras y el fallecimiento de su sobrina, Delina Díaz, por falta de atención médica, entre otros episodios.