Enojadísima, una concejala le pegó un cachetazo a un colega

Como en una novela, una edila de la localidad neuquina de Piedra del Aguila insultó y luego abofeteó al presidente del cuerpo municipal. La discusión empezó porque el Concejo no quería renovar un contrato a una empleada municipal

La concejal Olga Quinteros, del Movimiento Popular Neuquino de la localidad neuquina de Piedra del Aguila, abofeteó al Presidente del cuerpo, Eduardo Enrique (PJ), enojada porque se dilataba en una sesión la renovación del contrato laboral de una empleada municipal.

Previamente la mujer insultó a Enrique, a raíz de lo cual éste puso a consideración una sanción económica para la edil, lo que hizo que la discusión derivara en agresión.

La sesión del lunes en la localidad de Piedra del Aguila, a 250 kilómetros al oeste de la capital, tuvo una serie de condimentos que fueron luego el comentario obligado de este tranquila localidad ubicada a la vera de la ruta nacional 237.

El punto de conflicto fue la renovación del contrato laboral de una empleada municipal adscripta al Concejo Deliberante que funciona en el mismo edificio que la Municipalidad.

La Concejal Quinteros planteó la necesidad de la renovación laboral pero su pedido no tuvo eco en la presidencia del cuerpo ejercida por el justicialista Eduardo Enrique quien consideró que la cuestión no le correspondía al Concejo sino al Intendente.

Carlos Domínguez, periodista de Radio FM Sur de Piedra del Aguila informó a Télam que estaba presente en la sesión cuando comenzaron a templarse los ánimos por este tema y a subir de tono las expresiones de la concejal Quinteros.

El Presidente del Concejo se mantuvo en sus trece y derivó la renovación del contrato al Ejecutivo solicitando al mismo tiempo un cuarto intermedio buscando descomprimir la situación.

Domínguez relató que en esas circunstancias la edil "emepenista" comenzó a insultarlo y a recriminarle con fuertes agravios su actitud.

Enrique propuso una sanción económica para la mujer que a esta altura de los acontecimientos abandonó la banca, se acercó al Presidente del Concejo y le estampó una bofetada en el rostro.

La rapidez de reflejos del hombre lo llevó a hacer una finta para esquivar otro golpe de la mujer que a esa altura debió ser sujetada por otros pares debido a su estado emocional.

La reacción de la Concejal Quinteros fue rechazada por el resto de los miembros del Concejo y es posible que se analice una sanción en su contra.

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