Griselda Siciliani acompañó a su papá en la presentación de su último libro

El escritor, educador y poeta Noberto Sicliani lanzó “Maleducados, el fracaso de la nueva educación”. Y la actriz estuvo allí, brindándole todo su apoyo

Compartir
Compartir articulo

En los primeros días del paro docente en la provincia de Buenos Aires, los Siciliani dejaron en claro su postura. Primero Griselda Siciliani, quien posteó un mensaje en su cuenta de Instagram recordando que en los 90 participaba activamente de las marchas en defensa de la escuela pública. "(Íbamos) con toda mi familia", destacaba la actriz. Y luego fue el turno de Norberto Siciliani, su papá, quien pasó por varios programas de televisión -como Nosotros a la mañana– para mostrar una postura similar.

Días atrás ese respaldo mutuo tuvo lugar en la presentación del último libro de Norberto: Maleducados, el fracaso de la nueva educación, necesiario "para entender por qué, cómo y desde cuándo todo esto…", explica el autor. Y fue su hija quien no sólo lo acompañó en esta importante momento, sino que también difundió su obra en las redes sociales.

infobae
infobae
infobae

"¿Es maleducado el que no acepta las normas? ¿Y el que las acata sin cuestionar?", indaga Siciliani, quien fuera docente en distintos niveles educativos y tuviera un cargo público como asesor en el Ministerio de Educación porteño. Además, anteriormente publicó el libro Cien razones para no ir a la escuela.

Norberto todavía está casado con Ida, también docente, con quien tuvo seis hijos. Y Griselda es una de ellos, claro. "Tengo un modelo muy importante que son mis padres: dos grandes educadores -declaró tiempo atrás la actriz, quien por estos días se prepara para debutar con la obra Sugar, junto a Nicolás Cabré y Federico D'Elía-. Son un ejemplo de esfuerzo, ejercieron como maestros desde los 17 años. Siempre nos dieron libertad al momento de elegir".

Padre e hija mantienen un vínculo tan profundo como cercano. Él está siempre pendiente de ella; y la actriz de él, como lo demuestra al darle todo su apoyo con el libro.

Porque Griselda aprendió bien.

¡Pavada de maestro tuvo!

LEA MÁS: