La Rioja: condenaron a tres instructores de la escuela policial por la muerte de un cadete

Emanuel Garay falleció el 10 de febrero del 2018 por un cuadro de deshidratación en la primera clase de instrucción física, en la que otros siete jóvenes resultaron heridos

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El cadete Emanuel Garay murió el 10 de febrero de 2018 tras permanecer seis días internado luego del entrenamiento de ingreso a la Escuela. Según los forenses, falleció a raíz de un cuadro de “deshidratación aguda grave e insuficiencia renal” que le provocó una “falla multiorgánica”
El cadete Emanuel Garay murió el 10 de febrero de 2018 tras permanecer seis días internado luego del entrenamiento de ingreso a la Escuela. Según los forenses, falleció a raíz de un cuadro de “deshidratación aguda grave e insuficiencia renal” que le provocó una “falla multiorgánica”

Este martes, tres policías fueron condenados tras un juicio por la muerte de Emanuel Garay, quien pertenecía a la Escuela de Cadetes. El 10 de febrero del 2018 falleció por un cuadro de deshidratación en la primera clase de instrucción física, en la que otros siete jóvenes resultaron heridos. En el mismo fallo se absolvió a otros cinco policías que habían llegado a juicio acusados de distintos delitos vinculados al mismo hecho.

Los jueces Edith Agüero, José Luis Magaquian y Fernando Romero de la Cámara Tercera en lo Correccional de la Primera Circunscripción judicial, con asiento en la ciudad capital de La Rioja, condenaron a Elio Marcial a la pena de 30 años de prisión, acusado de “homicidio simple y lesiones graves en concurso real y en concurso ideal con los delitos de incumplimiento de los deberes de funcionario público y abuso de autoridad”.

Asimismo, condenaron a las instructoras Nadia Bravo y Adriana Rodriguez a 7 años de prisión como coautoras de las “lesiones graves (siete hechos), en concurso real y en concurso ideal con los delitos de incumplimiento de los deberes de funcionario público y abuso de autoridad”.

Por otro lado, absolvieron a los policías Ivana Luna, Marcos Miranday, Dardo Gordillo, Ramón Leguiza y Jorge Leguiza, quienes habían llegado a juicio oral acusados de “incumplimiento de los deberes de funcionario público y abuso de autoridad, en concurso ideal”.

La fiscalía, en sus alegatos, había pedido la pena de prisión perpetua para Gordillo y para ambos Leguiza, pero los jueces determinaron “la nulidad de la acusación fiscal en relación a los hechos, por lo que se ordenó sean puestos en libertad en forma inmediata”.

El cadete Garay, de 19 años, murió el 10 de febrero de 2018 tras permanecer seis días internado luego del entrenamiento de ingreso a la Escuela y, según los forenses, falleció a raíz de un cuadro de “deshidratación aguda grave e insuficiencia renal” que le provocó una “falla multiorgánica”.

En ese mismo episodio, otros siete aspirantes resultaron con distinto tipo de lesiones, que según la querella fueron “torturas” a que fueron sometidos los cadetes en su entrenamiento.

Las denuncias, según los jóvenes y sus familias, aseguraban que los chicos fueron sometidos a ejercicios extremos al rayo del sol con 40 grados de temperatura, y dijeron además que en “el sartén”, como se llama a la cancha de concreto donde eran obligados a estar, la temperatura era mucho más elevada.

Por aquellos días, el ex gobernador Sergio Casas visitó a los cadetes hospitalizados
Por aquellos días, el ex gobernador Sergio Casas visitó a los cadetes hospitalizados

El papá de la víctima, Roque Garay, lamentó el fallo judicial que absolvió a cinco de los acusados. “Estoy muy mal, es una vida que se ha ido y que no va a volver más, un estudiante que no le hacía mal a nadie y quería progresar en la vida”, dijo el hombre entre sollozos a la radio local Fénix.

Y explicó: “Estuve a las 5 de la mañana en la tumba de mi hijo pidiéndole fortaleza para llegar acá y poder escuchar la sentencia. Nadie me va a devolver a mi hijo, pero hay que aceptar lo que es”.

Cabe recordar que a partir de lo ocurrido el ex gobernador de La Rioja, Sergio Casas, anunció la remoción del por entonces secretario de Seguridad de la provincia, Luis Angulo y del jefe de Policía, Luis Páez. Además, el propio Casas publicó algunas palabras en su cuenta personal de Twitter, asegurando que desde su cargo haría “hasta lo imposible para llegar a dar con los responsables”. “Me hago responsable para que se instrumenten los cambios correspondientes en la metodología a la formación de los cadetes de nuestra provincia”, agregó en su mensaje, tras la muerte del aspirante y de que otros 16 de sus compañeros debieran ser asistidos por el esfuerzo al que fueron sometidos.

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