La suspensión del partido entre Colón y Atlético marcó un precedente en el fútbol argentino. La falta de
pago a varios integrantes del plantel profesional "sabalero" llegó al punto máximo
de su tolerancia e incitados por el titular de Futbolistas Argentinos
Agremiados, Sergio Marchi, el grupo tomó una decisión que trajo y seguirá trayendo
mucha 'cola'.
Según indica el reglamento –específicamente el artículo 109-, al ser el cuadro
de Mario Sciacqua el que no se presentó en el estadio Brigadier Estanislao
López, automáticamente los tres puntos tendrían que ir para el visitante. Y a
su vez, al "Negro" le correspondería la quita de otras tres unidades, algo que
haría mucho más comprometida su actualidad en la tabla de promedios, semanas
después de que se confirmara la reducción de 6 por parte de la FIFA.
Desde la entidad "cremosa" solamente se enfocan en sus intereses: buscan que se
les dé como ganado el partido, sin importar la quita de 3 puntos 'extras' para
el rival. Su justificación tiene como base la idea de su buena tarea
institucional, a contraposición de la de Colón, que vive un infierno
desatado por Germán Lerche, hoy ex presidente. Rafaela está al día con su
plantilla y creen que si no se cumple con lo que indican las normas, se beneficiaría
al que está 'en falta'.
Dato no menor, es que este cotejo estaba pactado para el viernes pasado, pero
se tuvo que postergar al lunes debido a este conflicto que amenaza con devastar
la vida de uno de los conjuntos grandes de Santa Fe. El clima venía siendo
espeso en la ciudad por las constantes marchas en contra de Lerche y algunos
hinchas habían manifestado su descontento con algunos futbolistas, tal como lo
hizo la dirigencia después de la medida que adoptaron.
Uno de las mano derecha de Grondona en AFA se fue por la puerta trasera de la institución en medio de serios incidentes y desde la calle Viamonte, todavía no
dieron su veredicto al respecto: el Tribunal de Disciplina se encarga de
evaluar fallos los días jueves, pero el tema quedó pospuesto para el próximo,
luego de no haber resolución en el pasado.
Marchi les prometió a los jugadores de Colón que hará todo lo posible para que
la quita de puntos no se haga realidad y desde el seno del plantel de Atlético
admiten que hay una especie de presión para que los dirigentes de su propio
club no lleven más allá el tema y se dispongan a poner en disputa los puntos
que reclaman –y en teoría, les corresponden- en los escritorios.
A los intereses de uno y otro bando, hay que añadirle los de terceros, más precisamente de los otros equipos. Es que a los que luchan arriba, no les conviene que Rafaela se acredite las unidades tan fácilmente sin un partido de por medio; pero los que pujan por el descenso ven con buenos ojos la idea de que un contrincante directo como el "Sabalero", continúe en caída libre en la tabla de promedios. La definición del torneo se acerca y la incertidumbre es total.