Sin dudas Diego Leuco encontró un punto de inflexión en su trayectoria como periodista tras un cambio radical en su carrera a principios del año último. Renunció al histórico ciclo de noticias Telenoche (El Trece) para unirse a “Antes que nadie”, un programa de streaming de Luzu TV. Este movimiento no sólo marcó un giro de 180 grados en su trayectoria profesional, sino que tambíen le permitió posicionarse en el ámbito que más le apasiona: la fusión de actualidad con entretenimiento.
Bajo su dirección, el ciclo logró captar una audiencia significativa, atrayendo tanto a seguidores leales de su trabajo anterior como a una nueva generación de espectadores interesados en formatos innovadores. La capacidad de transmitir noticias y actualidad de forma dinámica e interactiva son las claves de su éxito. La libertad creativa y la posibilidad de adaptar los contenidos a una audiencia más joven y digitalizada fueron los factores determinantes en su satisfacción profesional.
De hecho, suele repetir que esta forma de comunicación sincera y directa es algo que valora profundamente. Incluso, en un contexto familiar donde la verdad prevalece, también recordó cómo sus padres siempre respaldaron cada uno de sus intereses y pasatiempos, desde la equitación, teatro, clown, magia, pintura, música, hasta el taekwondo. Este apoyo incondicional y la posibilidad de explorar múltiples disciplinas contribuyeron a su versatilidad.
Gracias a este entorno es que en cada emisión del ciclo pueden revelarse las más variadas anécdotas del pasado, que no dejan de sorprender tanto a quienes en el estudio se encuentran como al público en general. Y una muestra de ello es lo vivido en las últimas horas.
“Si habré hecho cursos de clown allí en el Centro Cultural Rojas”, comenzó su relato el conductor, para luego rememorar una anécdota ocurrida en la vía pública, historia que no salió como él hubiera esperado. “Hacíamos una que era una pelotudez total”, se sinceró, y continuó: “Íbamos con la naricita de payaso, ¿viste? Y había un chiste en el que ¿viste lo que estaba adentro de los ojalillos, la parte redondita perfecta? se la ponías a la foto de tu DNI y la pintabas de rojo, como que tenías una nariz de payaso”.
Esa preparación previa, desembocaba en que “le entregabas a la policía y cuando el tipo estaba mirando la foto vos te ponías la nariz, entonces cuando levantaba la vista, ya estabas con la nariz de payaso puesta. Lo hice una vez cuando me paró la poli en el auto”, recordó. Fue en ese entonces que sus compañeros de equipo comenzaron a reírse, a la vez que no daban crédito a lo que estaban escuchando.
Sin embargo, Leuco continuó sintiéndose seguro del tema: “Nosotros esperábamos que nos parara la policía para hacer ese chiste”, en tanto que Johanna Yoyi Francella lo interrumpió: “No, Diego, no, ¿vos entendés que todo lo que nos contaste en este tiempo? Y nunca contaste esto que es el top tres de las peores cosas que escuché tuyas”, a lo que su interlocutor se justificó al aclarar que “es que lo voy administrando”.
“Tenés que tener muy buen timing porque vos le das el documento, el tipo mira, se toma un segundo, y en ese momento que va a chequear vos ya estás así con la nariz puesta”, explicó sobre los pormenores de la escena. Pese a ello, reveló que nada salió como lo esperaba: “Me agarra el documento y me pregunta qué es eso. Y yo, ‘no, disculpá', y yo era muy chico”, para culminar en que debió quitarse la nariz de inmediato y continuar con las consultas pertinentes. Todo ello, en medio de la risa en el estudio, en el ciclo del que también son parte Mica Vázquez y Martín Trinche Dardik.