El debate sobre el progreso y la innovación en países como Estados Unidos suele centrarse en la generación de ideas, pero Bill Gates sostiene que el verdadero desafío radica en los sistemas que permiten que esas ideas se materialicen.
En su blog, el cofundador de Microsoft y filántropo reflexiona sobre cómo las estructuras económicas, políticas y regulatorias pueden impulsar o frenar el avance, y destaca que “el progreso y la innovación no solo dependen de las buenas ideas, sino de los sistemas, económicos, políticos y regulatorios, que las ayudan a difundirse y prosperar”.
Cuál libro le permitió entender a Bill Gates los retos que persisten en la actualidad
El análisis de Gates se apoya en el libro Abundancia de Ezra Klein y Derek Thompson, que examina los obstáculos estructurales que impiden el desarrollo en cinco áreas: crecimiento, construcción, gobernanza, invención e implementación.
Gates resume que “cada una examina un obstáculo diferente que impide lograr resultados”, y resalta cómo la sección sobre implementación aborda el caso de las vacunas contra la neumonía y la importancia de los incentivos para trasladar los avances científicos al mundo real.
Qué retos recordó Bill Gates sobre el alcance de su fundación
La experiencia personal de Gates con la Fundación Gates ilustra este punto. En 2007, la organización enfrentó la inacción de la industria farmacéutica ante la necesidad de una vacuna contra la neumonía en África.
La solución fue un acuerdo inédito: “Hicimos un trato con las empresas: si lo fabrican, lo compramos. Esta promesa, conocida como Compromiso Anticipado de Mercado, condujo a la creación de vacunas asequibles contra la neumonía que han salvado aproximadamente 700.000 vidas”, relató Gates en su blog.
Esta estrategia, basada en incentivos de mercado, permitió superar la falta de interés comercial y demostró el impacto de diseñar sistemas adecuados para la implementación de innovaciones.
En qué otros sectores existen dificultades para un progreso estable
La dificultad de llevar la innovación a gran escala no se limita a la salud. Gates señala que en el sector energético, la transición hacia tecnologías limpias enfrenta barreras similares.
“Llevar esas tecnologías al mercado es increíblemente difícil, sobre todo cuando requiere construir nueva infraestructura física. Uno de los mayores obstáculos para la energía limpia en Estados Unidos es el proceso de permisos para las líneas de transmisión de larga distancia”, explicó Gates.
La lentitud y el costo de estos procesos impiden la modernización de la red eléctrica y, por extensión, el avance hacia una energía más asequible y confiable.
Qué otros factores impide el progreso de una nación
La gobernanza fragmentada es otro factor que, según Gates, ha debilitado la capacidad de acción del Estado. “Hoy en día, la autoridad está repartida entre tantas agencias y jurisdicciones que incluso los proyectos más sencillos quedan estancados. Y cuando avanzan, surge un segundo problema: el coste”, advirtió Gates.
Esta dispersión de responsabilidades y el aumento de los costos dificultan la ejecución de proyectos esenciales. Asimismo, el impacto de estos sistemas se refleja en problemas sociales como la falta de vivienda.
Gates cita el análisis de Abundancia para desmontar ideas preconcebidas: “Mucha gente cree que las enfermedades mentales o el consumo de sustancias son las principales causas. Pero los datos muestran una historia diferente.
Agregó: “Aunque las tasas de adicción y enfermedades mentales son más altas en Virginia Occidental, California tiene tasas mucho más altas de falta de vivienda, porque los costos de la vivienda son mucho más altos”.
Quién tiene la responsabilidad de estos obstáculos para el progreso
La responsabilidad de estos obstáculos, según Gates, recae en ambos partidos políticos. “Los autores señalan cómo los republicanos critican la regulación, al tiempo que bloquean las inversiones gubernamentales o desmantelan las instituciones necesarias para una buena gestión de permisos”, escribió Gates en su blog.
Al mismo tiempo, los demócratas, pese a confiar en el poder del Estado, han sumado procesos y regulaciones que dificultan la ejecución: “El progreso no se logra simplemente financiando proyectos. Se logra terminándolos. Y si se le pide al gobierno que asuma grandes desafíos, hay que asegurarse de que pueda cumplirlos”, subrayó Gates.
A pesar de estos desafíos, el empresario mantiene la convicción de que el gobierno estadounidense puede ser eficaz cuando existe voluntad política. “Nuestro gobierno es increíblemente eficaz construyendo infraestructura y acelerando la innovación cuando lo desea”, afirmó Gates.