Preocupados por los estragos que la gripe aviar y el aumento de las temperaturas del mar peruano provocado por El Niño están causando en los pingüinos de Humboldt, investigadores piden ayuda para ubicar a especímenes marcados con una banda de acero. Temen que hayan muerto o estén varados en cualquier zona de la costa peruana o chilena.
Estos especímenes forman parte del programa de investigación Punta San Juan, que estudia los ecosistemas marino-costeros de la Corriente de Humboldt para promover la conservación de la biodiversidad. En suma, este es un centro de investigación de campo basado en la reserva guanera de Punta San Juan (PSJ), ubicado en Ica. Este forma parte de la Reserva Nacional Islas, Islotes y Puntas Guaneras, gestionado por el Servicio de Áreas Naturales Protegidas del Perú (Sernanp)
Vale precisar que el Programa Punta San Juan marcan a los pinguinos con unas bandas de acero inoxidable en la aleta izquierda. Cada banda tiene un código de 4 digitos, de 1 letra y 3 números.
Ante la publicación, usuarios de la red social reportaron que han visto varios ejemplares acercándose peligrosamente hacia zonas con alta densidad poblacional.
Si encuentras un pinguino marcado debes comunicarlo al correo info@puntasanjuan.org
Sobre Punta San Juan y los pingüinos
Punta San Juan es una península de 54 hectáreas ubicada en la costa sur del Perú, en la ciudad de Marcona, en la región Ica. Allí el Programa, durante más de 25 años, se ha dedicado a la investigación de poblaciones silvestres y de organismos marinos para comprender mejor cómo interactúan con su entorno y cómo la actividad humana afecta sus poblaciones.
Lo más impresionante de esta punta es que atesora una de las colonias reproductivas de pingüinos de Humboldt más grande del Perú, albergando más del 30% de la población total de esta especie en nuestro país, de acuerdo al Censo Nacional de Pingüinos de Humboldt realizado en el 2014.
También hay grandes colonias de lobos marinos y aves marinas.
Lamentablemente, desde hace unos meses se reportan varias muertes debido a los embates de la gripe aviar, que ha causado estragos en las poblaciones de aves costeras y lobos marinos.