BIEN ACTUALES. Empezar por lo más moderno es lo que corresponde. A la izquierda, un baño en suite que tiene espíritu de spa en un departamento que reformó la arquitecta Dolores Otamendi y ambientó María Caserta. Uno de los ambientes fue sacrificado en post de este espacio de descanso que tiene como protagonista un hidromasaje (Jacuzzi).
Una mampara de vitraux se actualizó con el amarillo y se usó para comunicar el vestidor con el baño. La bañadera diseñada por Philippe Stark es la vedette y se acompañó con un puf dorado y una banqueta que sigue el guiño de color.
La artista Cristina Schiavi y Nushi Muntaabski fueron los responsables de este baño único: venecitas en distintos tonos de azul y verde, amarillo y negro.
Un vinilo hace de un toilette sencillo un baño con personalidad.
PORTE DE ÉPOCA. Pensando en aprovechar la vista al mar, el arquitecto uruguayo Carlos Ott se animó a un baño con paneles de vidrio en el que las placas de mármol cubren el piso y las paredes y dan forma a una bañadera. Bacha con pie estriado Porte de época. Hay cosas que nunca pasan de moda: los artefactos antiguos, objetos y muebles que resisten al paso del tiempo siempre están vigentes.
En lo de la joyera y curadora Laura Patrón Costas un toilette se revistió en madera de demolición combinada con pisos graníticos en diseño damero. Los artefactos son totalmente vintage (Pasado imperfecto), igual que el espejo circular biselado.
Aunque menos tradicional, este baño recupera varios elementos vintage como el piso calcáreo damero y los cerrajes del mueble laqueado y el espejo del mercado de pulgas restaurado por la dueña de casa, la ceramista y RRPP Cecilia Nigro.
Machimbre patinado, pisos de calcáreo y una bacha con pie estriado son las claves de estilo en este baño de un puesto reciclado.
El baño principal de la casa de Fernando Diez, de Don Terrenal, se construyó en lo que fue la dependencia. Un mueble de tocador antiguo se convirtió en vanitory. Para hacerlo más cálido se le removió el lustre y se le apoyó una bacha, además de una selección de objetos vintage.
NUEVA VIDA. En su baño, Gabriel Hanfling, dueño de Infinit, se animó a mezclar los pisos y paredes de porcellanato con una ducha de cemento y pisos símil madera y una pared de venecitas. Una mesada chica sostiene una bacha ovalada que se combinó con un espejo clásico y lámpara de caireles.
La pared color aguamarina y la mesada gruesa de madera son las dos protagonistas de este baño que ambientó el estudio Tati Mancini. Una bacha de apoyo rectangular dialoga con un espejo de marco de alpaca y dos grabados con marcos dorados a la hoja.
El baño de la casa de playa diseñada por la arquitecta María Cecilia Urruspuru lleva paredes de machimbre pintado, una mesada de lapacho y una bacha de apoyo cuadrada con puntas redondeadas (Klipen, en Uruguay). Un estante alargado y un banco que sostiene toallas suman calidez.
Fotos A. Atlántida
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