La bonita cascada escondida en el Pirineo que es ideal para darse un baño: se llega por una sencilla ruta

Los Pirineos, conocidos por sus imponentes montañas y extensos valles, se alzan como uno de los parajes naturales más impresionantes de España. De la mano de sus impresionantes paisajes, este enclave se ha convertido en un destino rural que atrae cada año a infinidad de viajeros. Además, gracias a su extensa red de senderos, los más aventureros pueden disfrutar de rincones y parajes que son una maravilla. De este modo, el Valle de Tena es uno de los enclaves ideales para disfrutar de todos los encantos del Pirineo, pues cuenta con un conjunto natural que invita al explorador a perderse por todos sus paisajes.

Así, uno de los rincones más singulares de este valle es la cascada D’os Lucas, también conocida como la de Orós Bajo, por el pueblo donde se ubica, dentro del término municipal de Biescas. Este chorro sorprende al viajero con sus dos saltos de agua consecutivos de unos cinco y siete metros respectivamente, y con la sencilla ruta que lleva hasta ella. Este sendero es de apenas un kilómetro y medio en sentido ida y vuelta, y tiene una duración estimada de unos 40 minutos.

El punto de partida del recorrido es el aparcamiento de Orós Bajo, el cual se ubica pasado el puente que cruza el Barranco d´ os Lucas. Este lugar es ideal para dejar el vehículo, aunque debido a la gran cantidad de afluencia de turistas, el Ayuntamiento de Biescas ha comenzado a regular el aforo. Desde el aparcamiento, se debe continuar a pie por un sendero que asciende en paralelo al barranco hasta llegar a una presa con una cascada.

A partir de este punto, se sigue remontando el barranco por el cauce, sin un itinerario claramente definido pero de fácil recorrido, determinado por el caudal del agua. En ocasiones, es necesario cruzar el cauce varias veces. Después de unos 15 a 20 minutos, se llega a la cascada d´os Lucas, donde el viajero puede disfrutar de un bello rincón escondido en mitad de los Pirineos, donde el sonido del agua al caer y la imagen que crea deja con la boca abierta. Pero esto no es todo, pues la caída del agua crea una preciosa poza de agua que es ideal para bañarse y refrescarse durante los meses de verano.

A su vez, es una actividad ideal para realizar en compañía de la familia y amigos, pues bastante sencilla. No obstante, a pesar de ello se recomienda llevar un equipamiento adecuado y realizar el sendero, evitando las épocas de lluvia o deshielo, que es cuando tiene la cascada un mayor caudal. Cabe destacar también, que en la visita a la cascada el viajero puede aprovechar y acercarse también a la iglesia mozárabe de Santa Eulalia del siglo XI, situada a las afueras del pueblo de Orós bajo.

Desde Huesca, el viaje hasta Orós Bajo es de alrededor de 50 minutos por la carretera A-23. Por su parte, desde Pamplona el trayecto tiene una duración estimada de 1 hora y 45 minutos por la vía A-21.