Un jugador del Málaga ‘vende’ su camiseta a un aficionado por 50 euros: la realidad económica detrás de este gesto

Lo ocurrido este fin de semana en el estadio Cerro del Espino entre un aficionado y el jugador del Málaga Dani Lorenzo se ha viralizado en redes sociales. El asistente del único gol del partido ante el Atlético de Madrid ‘B’ y que le dio la victoria al conjunto boquerón protagonizó una acción que captaron las cámaras de El Chiringuito TV y por las que ha pedido disculpas posteriormente.

Tras el partido, el centrocampista se dirigió a los aficionados, como es habitual, para agradecer el apoyo durante el partido. En ese instante, un seguidor le pide la camiseta: “Dani, tírate el rollo hombre que vivimos en Madrid. Danos una camiseta que la colguemos aquí, que roneemos del Málaga”. “Yo te la daría, lo único que a nosotros nos la cobran ya, 50€”, contestó Lorenzo. Acto seguido, el aficionado, con un claro “yo te los doy”, saca un billete de su bolsillo y hace un intercambio con el jugador.

Al parecer, este gesto que el jugador declaró haber hecho “con toda la buena fe del mundo” ha generado polémica en las redes sociales. Una parte de la comunidad está en contra de este hecho y lo califican de “miserable”, incluso lo tachan de estrategia para “empezar a cobrar” por las camisetas que regalan los jugadores. Mientras, la otra parte entiende la postura del jugador: “Los clubes normalmente ponen un límite de camisetas que puedes regalar, cuándo pasas de ese límite te toca pagarlas, es lógico y más en clubes de segunda división para abajo”.

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Ante este revuelo, Dani Lorenzo se vio obligado a hacer declaraciones públicas para aclarar la situación: “Ha sido muy rápido. Para que la gente lo entienda, estamos en Primera RFEF, no soy millonario, ya me gustaría. A nosotros nos dan un número de camisetas para repartir y yo ya lo he pasado. A partir de ahí el club nos las cobra. Se lo comenté al hombre que estaba en la grada y él me sacó 50 euros. Me pilló tan de sorpresa que me lo ofreciera que reaccioné de la forma más natural de cogerlo y cambiarla, pero ahora pensándolo bien no debería haberlo cogido. Lo he hecho con toda la buena fe del mundo, espero que la gente lo entienda”.

En diciembre, Aitana Bonmatí protagonizó algo similar a lo vivido el domingo en Madrid. Al término de un partido ante el Costa Adeje Tenerife en el Heliodoro Rodríguez, una aficionada le pidió la camiseta a la jugadora, a lo que esta respondió: “No puedo, no puedo, lo siento”. Es habitual en estas situaciones que los jugadores digan “en el último partido”. Esto se debe a que los clubes otorgan un número limitado de camiseta a sus jugadores, y este es muy bajo cuando no se habla de la Primera División, aunque incluso en la máxima categoría tienen límites.

En la Liga F, el Barça y la mayor parte de los clubes disponen de dos camisetas por equipación por temporada, por lo que, regalar las camisetas a mitad de temporada se convierto en un lujo, que en muchas ocasiones hace ‘perder’ al futbolista. En el momento en el que excedan el número de camisetas entregadas por sus respectivos clubes, tienen que pagar la elástica.

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Incluso en la categoría reina del fútbol masculino existen estas restricciones. En el Getafe, los jugadores no reciben camiseta extra durante la temporada, pues si la quieren, tienen que pagarla. En Las Palmas ocurre algo similar. La plantilla no recibe ninguna prenda extra durante la campaña, sino que, una vez que finaliza la temporada, les regalan seis o siete camisetas. En otros clubes, como el Mallorca, el Granada, el Sevilla o el Almería reciben una cantidad de camisetas -20, entre 15 y 20, 20 y 19, respectivamente-, que los jugadores distribuyen como quieren. Si se quedan sin ellas o quieren más, tienen que poner de su dinero. Esto es a lo que se refirió Lorenzo cuando dijo: “A nosotros nos dan un número de camisetas para repartir y yo ya lo he pasado”. De hecho, en el Osasuna los utilleros preparan tres por partido, pero el club apunta las que ‘gastan’ y se las descuentan de la nómina de fin de año.

Los únicos que gozan de un mayor privilegio en este sentido son los grandes clubes como el Atlético de Madrid, el FC Barcelona o el Real Madrid. En el caso de los rojiblancos reciben cuatro elásticas por partido más la que llevan puesta, y en el club azulgrana y el conjunto blanco reciben dos por partido. Además, clubes como el Alavés o el Rayo Vallecano dan un 20% de descuento a partir de la tercera, es decir, un descuento para las que quieran adicionales a las que ya les facilita la entidad.