Madrid, 31 mar (EFE).- La trigésima jornada de LaLiga EA Sports resumida en las imágenes más destacadas:
- La tristeza de Quique Sánchez Flores
Después de lograr una victoria importantísima para el Sevilla en el Coliseum ante el Getafe (0-1), Quique Sánchez Flores compareció en rueda de prensa triste pero firme para denunciar un acto lamentable. Un pequeño sector de la grada que estaba detrás del banquillo le llamó "gitano". Ese insulto racista se unió a otro que reflejó en el acta el árbitro Javier Iglesias Villanueva, que paró el partido en la segunda parte porque otro pequeño sector de la afición del Getafe coreó "Acuña mono" y "Acuña vienes del mono".
Quique, visiblemente afectado, denunció lo ocurrido en la que fue su casa hasta en tres etapas diferentes: "Estoy orgulloso de cada poro de mis venas que pueda respirar gitano. Pero una cosa es ser gitano y otra es que lo utilicen como un insulto racista. Me parece aberrante", dijo. Sin duda, fue la imagen más triste de la jornada.
- El fallo de Peter Federico
Peter Federico llegó al Valencia procedente del Real Madrid Castilla en el mercado de invierno. Debutó en Primera División el pasado 10 de febrero de 2024. Con unas cualidades tremendas, hasta el momento, siempre suplente, su mejor actuación la firmó precisamente frente al Real Madrid hace cuatro jornadas. Salió desde el banquillo en el último cuarto de hora y estuvo a punto de decantar el duelo del lado valencianista.
Poco a poco se fue ganando la titularidad y este fin de semana Rubén Baraja por fin le dio la alternativa para enfrentarse al Mallorca. Sin embargo, Peter Federico no jugó un buen partido. En los 65 minutos que estuvo sobre el césped, apenas estuvo en contacto con la pelota 15 veces; completó seis pases de nueve intentados y ganó un 50 por ciento de sus duelos. Pero Peter Federico tuvo una ocasión de oro para dar la victoria al Valencia. A portería vacía, con todo a favor, sin rivales cerca y con el portero vencido, erró en su disparo. Decepcionado, cayó al suelo. Baraja, le echó después un cable: "Yo también habrá fallado ocasiones así", afirmó.
- Stuani, desatado
Eclipsado por la gran temporada de Artem Dobvyk, Christian Stuani tiene un papel complicado en el Girona pero que ha cumplido con un sobresaliente. El delantero uruguayo ha sido suplente en 23 de los 28 partidos que disputado de Liga. Pero, en los minutos finales, se ha mostrado como un jugador decisivo y súper efectivo. Ha marcado hasta ocho goles este curso, una cifra nada despreciable a la que añade los cinco tantos que ha marcado en la Copa del Rey.
Sin embargo, su último gol, tal vez es el que más ha desatado su euforia. Con empate en el marcador (2-2), Stuani apareció en el tiempo añadido para doblegar al Betis, que sufrió la voracidad de un hombre incansable que cuando marcó el decisivo 3-2 se desató. Corrió eufórico por la línea de fondo perseguido por sus compañeros. Acabó abrazado por todos ellos, que agradecieron un tanto clave en la pelea del Girona por disputar la próxima edición de la Liga de Campeones.
- El derribo de Álvaro Valles
El partido que enfrentó al Barcelona y Las Palmas tuvo un par de imágenes dignas de mención: Xavi en una cabina de prensa para cumplir su segundo partido de sanción o el gesto de Raphinha, que hizo el gesto del VAR cuando marcó el gol de la victoria (al conjunto azulgrana le anularon tres goles por fuera de juego). Sin embargo, la más importante e influyente fue la que protagonizó el portero Álvaro Valles.
Con 0-0 en el marcador, el portero de Las Palmas atropelló a Raphinha como un tren de mercancías cuando el jugador brasileño encaraba la portería rival. Fue expulsado con roja directa. Era el minuto 25 y dejó al equipo canario con un hombre menos durante una hora de partido. La entrada fue muy dura y afortunadamente Raphinha no sufrió ningún daño. Valles protagonizó una imagen que, probablemente, cambió el destino del partido.
- Los goles liberadores de Rodrygo y la reaparición de Militao
La sequía goleadora de Rodrygo Goes comenzaba a ser alarmante. Muchos pedían menos minutos y más oportunidades para un jugador que parecía atascado de cara a las porterías rivales. Sin embargo, la semana pasada mostró síntomas de recuperación con un tanto a España con la selección brasileña. Aún así, le faltaba recuperar su olfato con el Real Madrid, con el que no marcaba desde el pasado 10 de febrero en un choque ante el Girona.
Desde entonces, disputó siete encuentros con el conjunto blanco, dos de ellos de Liga de Campeones ante el Leipzig. En ninguno vio portería. Entonces, por fin, ante el Athletic, se liberó por completo con dos goles que dieron la victoria a su equipo. Pero no sólo Rodrygo fue la imagen del Bernabéu. También Militao, que después de meses ausente por una grave lesión reapareció para disputar un par de minutos testimoniales. Fue ovacionado por su público cuando saltó al terreno de juego por Dani Carvajal. EFE
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