A una semana para que termine el 2025, 12 de las 17 comunidades autónomas han presentado sus presupuestos para el próximo año. En medio de la saturación por la epidemia de la gripe, el dinero destinado a la sanidad pública apenas crece para el 2026, según denuncia la Federación de Asociaciones en Defensa de la Sanidad Pública (Fadsp).
A nivel nacional, los presupuestos sanitarios crecen en promedio 69,25 euros por habitante, un 3,55% más que en 2025. “Es insuficiente para las necesidades del sistema sanitario”, critican desde Fadsp, que ya en 2022 reclamaba un aumento de 1.000 euros per cápita para la sanidad pública. A las puertas del nuevo año, la organización alerta de que España “seguirá estando por debajo de la media de los países de la UE en gasto sanitario per cápita, y muy por debajo de los países del euro”.
La federación ha analizado los presupuestos per cápita de las 17 comunidades autónomas, suponiendo que aquellas cinco que todavía no los han presentado -Murcia, Cataluña, Baleares, Comunidad Valenciana y Extremadura- prorrogarán los de 2025. De media, el presupuesto sanitario para el próximo año será de 2.013,72 de euros por habitante, pero al mirar región por región las diferencias destacables.
De Murcia a Asturias: el presupuesto sanitario de las comunidades autónomas
En 2026, será Asturias la que más presupuesto aumente respecto al año anterior, un total de 2.506,71 euros por habitante, lo que supone un incremento de 84,43 euros. En comparación, Murcia tan solo destinará 1.511,18 euros por habitante, casi 1.000 euros menos que sus vecinos del norte. “Nuevamente, las diferencias son excesivas" valoran desde la Fadsp. “Una variabilidad tan amplia dificulta que se puedan proveer los mismos servicios sanitarios, en cantidad y/o en calidad, y rompe con la necesaria equidad y cohesión entre las CCAA”, añaden.
A Murcia le sigue Cataluña, que este año volverá a gastar 1.515,99 euros por habitante en la sanidad pública. De las que amplían presupuestos para 2026, Madrid se queda con el más bajo, con 1.537,28 euros per cápita. La comunidad ya presentó para 2025 los fondos per cápita más escasos (1.482,25 euros) y lleva siendo desde 2021 la región con el menor presupuesto per cápita para la sanidad pública. En 2026, el dinero crecerá 55,03 euros por habitante, lo que le ha hecho superar ligeramente lo destinado por Cataluña y Murcia que, por el momento, prorrogan sus presupuestos para el nuevo año.
“Hay un aumento escaso y muy mal repartido que hace que se mantenga la insuficiencia financiera global de nuestro sistema sanitario y consolida las desigualdades interterritoriales”, valoran desde la Fadsp. La federación apunta que “la situación es más complicada en las comunidades autónomas que prorrogan presupuestos porque en el mejor de los casos los nuevos presupuestos no estarán operativos hasta el 2º trimestre de 2026 y eso impedirá hasta entonces el necesario refuerzo del sistema sanitario”, advierten.
El dinero público que se va a la privada
Mientras el presupuesto destinado a la salud de la población se mantiene estancado en muchas regiones, el destinado para la atención sanitaria privada cada vez es mayor. El informe Evaluación de la sanidad privada en el sistema sanitario de España, elaborado por el Ministerio de Sanidad, evidencia que el dinero público paga por el 34,6% de las estancias hospitalarias en hospitales privados no pertenecientes al Sistema Nacional de Salud (SNS). Estos fondos también cubren el 17,6% de las altas hospitalarias y el 21% de las intervenciones de cirugía mayor ambulatoria en estos centros.
Según datos de 2023, comunidades como Murcia (65,6%), Canarias (64,5%), Extremadura (62,8%) o Aragón (60,5%) pagaron más de la mitad de las estancias en hospitales privados que no pertenecen al sistema público, mientras que Cantabria o La Rioja pagaron menos del 5% del total con fondos autonómicos. En Extremadura (51,4%), Galicia (50,7%) y Murcia (49,8%), el dinero público también cubrió la mitad de las intervenciones quirúrgicas privadas de 2023.