Fran Antón, marido de Kiko Hernández, ha subido un vídeo a sus redes sociales para mostrar su desesperación por el cierre de El Cielo, su negocio nocturno en Melilla, por parte de la Policía Local. El actor se ha encadenado a la puerta del bar y ha iniciado una huelga de hambre.
Tal y como se puede ver en las imágenes compartidas por el propio Antón en su perfil de Instagram, la Policía Local de Melilla ha clausurado y precintado el bar El Cielo de Melilla, ubicado en la azotea del Hotel Melilla Centro y gestionado por Fran Antón y Kiko Hernández. El cierre, que ha tenido lugar este martes 9 de diciembre, ha provocado una reacción inmediata por parte de Antón, quien se ha encadenado a la puerta del establecimiento y ha anunciado el inicio de una huelga de hambre.
“Por motivos que no puedo decir y que desconozco, nos ha clausurado el local. Dicen que no podemos hacer nada, ni siquiera entrar a por nada”, lamenta Antón en el vídeo publicado, mostrando la licencia del local y asegurando que “todavía está vigente”.
En su comunicado, el actor ha explicado su decisión: “He decidido quedarme aquí, en la puerta, porque teníamos un mes de mucho trabajo y eventos por delante, y es la única solución que veo. La Justicia no está de nuestra parte, entonces me he encadenado aquí y voy a hacer huelga de hambre hasta que esto no se solucione o nos digan algo”. “No puedo aguantar más”, dice con la voz entrecortada, visiblemente emocionado.
Acusaciones de acoso institucional
La clausura del local se produce tras semanas de denuncias públicas por parte de Kiko Hernández y Fran Antón sobre una supuesta campaña de acoso institucional en Melilla. Hernández, conocido tertuliano y presentador, ha presentado una denuncia por homofobia después de la difusión de un vídeo manipulado en el que aparecía besándose con un político local, imágenes que, según él, fueron generadas mediante inteligencia artificial y atribuidas a un partido político.
Tanto Hernández como Antón han sostenido que la persecución institucional estaría motivada por la promoción que han hecho de Melilla como destino turístico, una iniciativa que, según su versión, no habría sido bien recibida por determinados sectores del poder local.
En este contexto, Antón ha reiterado: “Estoy haciendo este vídeo porque creo que ya es necesario, porque ya no puedo aguantar más. Estoy aquí en El Cielo, en el local que abrimos hace escasamente un año con toda la ilusión y con todo el cariño. Tenemos una licencia que nos dio el dueño del local y que está vigente”.
El Cielo, su proyecto en común
El bar El Cielo de Melilla representa un proyecto personal y profesional relevante para la pareja. La implicación de Hernández y Antón en la gestión del local ha sido absoluta, supervisando desde la carta hasta la programación de actividades. El objetivo del establecimiento no era solo funcionar como bar, sino convertirse en un espacio cultural y social que dinamizase la vida nocturna de la ciudad.
La elección de Melilla como sede del proyecto responde, en el caso de Antón, a su deseo de contribuir al desarrollo de su ciudad natal, mientras que para Hernández supone una nueva etapa profesional alejada de la exposición mediática. El negocio ha formado parte de una estrategia de diversificación profesional para Hernández, quien ha buscado consolidarse como empresario y mantener su vínculo con el público desde una perspectiva diferente.
El cierre de El Cielo de Melilla coincide con el regreso de Kiko Hernández a la televisión tras varios meses apartado de los platós. El ex gran hermano, que se desvinculó de No somos nadie en TEN, ha fichado por el polémico reality online La casa de los gemelos, donde es el encargado de presentar las galas en YouTube.