Luego de casi dos años de haber tomado posesión como concejal de Bogotá, Daniel Briceño oficializó su renuncia a la corporación distrital, con el fin de dar el salto al Congreso de la República, específicamente a la Cámara de Representantes, como cabeza de lista del Centro Democrático por Bogotá. El veedor ciudadano quiere llegar al Capitolio y para ello tendrá que hacerse contar una vez más en las urnas, así como lo hizo con éxito el 29 de octubre de 2023.
En su despedida, Briceño expuso una visión del servicio público anclada en la responsabilidad y la defensa de los ciudadanos, al hacer énfasis en la transformación personal. “Cuando entré por primera vez al Concejo de Bogotá, tenía casi 24 años de edad. Entré como un profesional universitario que venía a aprender, a escuchar y a entender cómo se tomaban las decisiones de esta ciudad”, afirmó el exconcejal, que fue primero asesor del cabildante Emel Rojas.
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El exconcejal relató cómo su carrera política se forjó desde los espacios menos visibles del cabildo, y destacó la importancia de la labor de los asesores y el aprendizaje adquirido en la gestión de presupuestos y la elaboración de planes de desarrollo. “Siendo asesor, yo aquí en este recinto trasnoché (...) Fui testigo de cómo se tomaban las decisiones sobre el futuro de Bogotá y el futuro de los ciudadanos”, agregó Briceño en su intervención en el cabildo.
“Un espacio para la responsabilidad”, Daniel Briceño
El salto a la curul fue, según sus palabras, el mayor honor de su vida, y todo porque en su concepto el ejercicio de un cargo de elección popular implica una exigencia ética y un compromiso con el interés público. “En este lugar aprendí que un cargo de elección popular no es un espacio para la comodidad, sino para la responsabilidad. Que una curul no se trata de quedar bien, sino de hacer lo correcto", sostuvo el hoy candidato cameral, que sacó pecho por sus denuncias.
“Cada voto, cada debate y cada denuncia que incomoda a alguien poderoso, tiene consecuencias reales para millones de personas”, agregó el exconcejal, que agradeció a los que lo acompañaron en su recorrido institucional: desde su familia y su mentor, Rojas, hasta los funcionarios y colegas del Concejo; así como a su bancada del Centro Democrático. No obstante, reservó un reconocimiento especial para los ciudadanos, que jugaron un papel clave en su labor.
“Ustedes hicieron posible esta historia. Gracias por creer en mí, por confiar en mí y esa confianza es un regalo que me marcó para siempre”, recalcó el veedor, dirigiéndose a los ciudadanos. Al proyectar su futuro político, reiteró su compromiso con la defensa de la libertad, la propiedad privada y los recursos públicos, y se comprometió a mantener una postura crítica frente al poder, sin distinción de partidos, con la seguridad de que su votación será importante.
Con ese panorama, dejó en claro que seguirá defendiendo a los ciudadanos que se sienten asfixiados con tantos impuestos. “Y exigiendo que el Estado cumpla su compromiso de administrar los recursos con transparencia y haciendo de la austeridad una regla y no la excepción. Continuaré denunciando, porque así le incomode a muchos, sean de mi partido o no sean de mi partido, para eso me eligen los bogotanos”, acotó el aspirante a la Cámara.
Finalmente, Briceño recalcó que su vocación de servicio trasciende los cargos y que su lucha por las causas ciudadanas continuará en la nueva etapa que inicia. “Me despido de esta curul, pero no me despido de las causas, no me despido de estas batallas. Nos volveremos a ver, porque Bogotá necesita que sigamos en pie, y yo sigo en pie más que nunca”, concluyó el exconcejal, que ejerció -incluso- una labor de oposición contra el alcalde Carlos Fernando Galán.