Según el Servicio Geológico Colombiano, el primer temblor registrado en Colombia sucedió en Cali y Popayán, en el año 1566. Un fuerte movimiento telúrico destruyó casas de tapia y teja.
Uno de los mitos que las personas creen en medio de un movimiento telúrico es que las nubes se ven quebradas. Pero lo cierto es que es falso. Según el Laboratorio de Ingeniería Sísmica de la Universidad de Costa Rica, no hay relación entre los sismos y este fenómeno en el cielo.
Para prevenir cualquier inconveniente en el trabajo si ocurre un temblor, lo primero que debe hacer es evitar es correr por los corredores y escaleras. También es importante mantener la calma y evacuar de manera adecuada el espacio en el que se encuentra. Es aconsejable ubicarse lejos de cualquier lámpara u objeto que pueda caer sobre el cuerpo.
La alcaldía de Medellín recomienda tener entre el botiquín de emergencias objetos para la atención de mascotas como gasas. También es importante tener el documento que garantice que es mascota de su propiedad, así como registros médicos.
En medio de la situación sísmica, es recomendable coger a la mascota para que no escape y hacerse en un lugar seguro.
Según la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, las casas que están preparadas para resistir movimientos telúricos son seguras en zonas como columnas y sitios alejados de ventanas. Por esto, se recomienda no poner en zonas altas objetos que puedan romperse con una caída o que puedan afectar a una persona en caso de emergencia.
¿Sabía que Colombia está sobre tres placas tectónicas? Según el Servicio Geológico Colombiano, el país está ubicado sobre la placa de Nazca, al oriente; la placa del caribe, que atraviesa a la mitad del país; y sobre la placa sudamericana, que va desde las dos placas mencionadas anteriormente mencionadas hasta la mitad del océano atlántico, donde limita con la placa africana y norteamericana.
El Servicio Geológico Colombiano indicó que los sismos son “sacudidas que se producen por la liberación de energía acumulada y que se propagan en forma de ondas. Cuando estas llegan a la superficie, generan movimientos que las personas pueden percibir y que, de acuerdo a su nivel de intensidad, pueden derivar en daños sobre las estructuras y sobre la naturaleza (como agrietamientos y deslizamientos)”.
La entidad indicó que se pueden dar por movimientos tectónicos, por el movimiento de magma en lugares cercanos a volcanes y por la extracción de combustibles.
Los municipios con mayor intensidad sísmica en el país son:
Los Santos, Santander, con más de 5.745 registrados entre mediados de 2022 y 2023, según Servicio Geológico Colombiano. Esta misma entidad afirmó a El Tiempo que Zapatoca, también en Santander, es el segundo municipio con más actividad telúrica con 1.228 sismos datados en los tiempos de estudios mencionados. Finalmente, en el municipio de Villanueva se sintieron 714 temblores.
Según Idiger, la actividad sismicidad en Colombia está relacionada con la actividad en la zona de subducción del pacífico colombiano. Una de las zonas con mayor concentración de eventos sísmicos en Colombia es el “Nido sísmico de Bucaramanga”, con epicentros ubicados en la zona de la Mesa de Los Santos en el departamento de Santander.
Según bomberos de Bogotá, es esencial tener en un kit de emergencia para temblores:
De acuerdo con la Unidad Nacional para la Gestión del Riego de Desastres (Ungrd) un sismo es la liberación súbita de grandes cantidades de energía, que se representan a través de ondas que se desplazan por el interior de la tierra y que al llegar a la superficie puede ser percibida por las personas, animales y hasta estructuras.
En el plano internacional se han reportado delicadas emergencias relacionadas con sismos en los últimos meses; si bien la tierra nunca deja de moverse, algunas de estas actividades son mucho más perceptibles para la ciudadanía. En Colombia este fenómeno genera una amplia preocupación por los antecedentes, lo que insta a los expertos a mantener en constante alerta y aclarar cualquier tipo de información sobre el mismo.
Sobre las 10:32 a. m. de este domingo, el Servicio Geológico Colombiano reportó un sismo de magnitud superior a tres en el departamento de Santander. Según los datos oficiales, el movimiento tuvo como epicentro el municipio de Los Santos y se dio a una profundidad de 153 kilómetros.
Entretanto, el sismo también pudo ser percibido en los municipios de Jordán y Cepitá y se evalúa si se llegó a sentir en otras zonas del país.
La erupción del volcán de lodo Los Aburridos, ubicado en San José Mulatos (Necoclí), en Turbo, Antioquia, dejó una estela de destrucción y desplazamiento en la comunidad.
Sobre las 7:57 a. m. se sintió un sismo moderado en el llano, específicamente en el municipio de la Macarena, donde el SGC reportó un movimiento de 2.9 a una profundidad de 326 kilómetros, por lo que pudo sentirse también en departamentos como Guaviare y Caquetá.
Sin embargo, las autoridades no han registrado, hasta el momento, daños a estructuras o informes de personas lesionadas, aunque extienden un llamado a la ciudadanía para reportar cualquier anomalía en viviendas o zonas públicas.
Los recientes temblores en el municipio de Los Santos, Santander, han generado preocupación en parte de la población colombiana. El Servicio Geológico Colombiano (SGC) expuso la razón por la cual tiembla en esa región, que convierte a Bucaramanga en una de las capitales más afectadas por los sismos.
Amanece en Colombia y así está la actividad sismológica en todo el territorio nacional, según el Servicio Geológico Colombiano (SGC) para este domingo 24 de noviembre de 2024:
En las primeras horas de la madrugada, el SGC reportó tres sismos de baja intensidad que no tuvieron mayor impacto. El primer hecho ocurrió sobre las 12:25 a. m. y tuvo como epicentro el municipio de Ciudad Bolívar, en Antioquia, con una magnitud de 2.4 y una profundidad 69 kilómetros.
Asimismo, a las 12:59 a. m., las estaciones de monitoreo del municipio de Piedecuesta, Santander, indicaron un sismo de intensidad 2.0 a una profundidad de 131 kilómetros. El tercer evento ocurrió en el departamento del Meta, específicamente en Uribe, donde se presenció un movimiento telúrico de magnitud 2.4 y que, según el SGC fue levemente percibido por los municipios cercanos.