Ministerio de Hacienda culpó a las utilidades de las empresas del alza de la inflación

El Índice de Precios al Consumidor (IPC) cerró en 9,28% durante 2023, jalonado por la división de transporte

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El IPC en Colombia volvió a dos dígitos tras 29 meses, pero sigue lejos de la meta del Banco de la República (entre 2% y 4%) - crédito Carlos Ortega/EFE
El IPC en Colombia volvió a dos dígitos tras 29 meses, pero sigue lejos de la meta del Banco de la República (entre 2% y 4%) - crédito Carlos Ortega/EFE

El Ministerio de Hacienda hizo un fuerte planteamiento sobre las utilidades de las empresas y el papel de estas en la inflación, tanto en Colombia como a nivel mundial.

De acuerdo con un documento emitido por la cartera, algunos estudios recientes encontraron que, relativo a su historia, la contribución de las utilidades de las firmas a la inflación tras la pandemia ha sido mayor en varios países, superando la de los costos laborales.

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Lo anterior obedece, principalmente, a que las firmas aumentaron sus precios aprovechando un mayor poder de mercado, originado en la presencia de disrupciones de oferta exacerbadas por una creciente demanda.

“Este documento encuentra que, en Colombia, al igual que en las economías desarrolladas, la contribución de las utilidades a la inflación reciente ha sido mayor que la contribución de los salarios, especialmente en sectores como el agropecuario y el minero, que no necesariamente coinciden con los que han generado mayor valor agregado en los últimos años”, anotó el ministerio.

No obstante, adujo que mientras en los países desarrollados esto representa un cambio estructural, en Colombia la contribución de las utilidades ha sido históricamente mayor que la de los salarios.

De igual forma, precisó que a través de un modelo de equilibrio general se encontró que, ante un choque inflacionario, un mayor poder de mercado de las firmas genera una amplificación de las presiones inflacionarias.

“La política monetaria debería responder en una magnitud que podría variar dependiendo del desanclaje de las expectativas de inflación”, se lee en el documento.

El documento, según el Ministerio de Hacienda, conocido como sellers’ inflation, genera la necesidad de abordar esta problemática a través de un conjunto diverso de herramientas de política, que incluyen fundamentalmente la política monetaria, pero también medidas adicionales como windfall taxes o impuestos a las ganancias extraordinarias de algunos sectores, como empezó a aplicar en Colombia recientemente, o medidas que tengan como objetivo fomentar la competencia y reducir así el poder de mercado.

Inflación de Colombia en 2023

El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) informó el 9 de enero que, tras haber llegado a un máximo de 13,34% en marzo, lo que puso en jaque la economía colombiana, el Índice de Precios al Consumidor (IPC), que mide la inflación, cerró en 9,28% interanual en 2023, lo que significó una reducción de 3,84% frente a 2022, cuando se ubicó en 13,12% interanual. Entretanto, el dato para diciembre de 2023 fue de 0,45%, lo que significó una reducción de 0,81% frente a diciembre de 2022, cuando se ubicó en 1,26%.

Dicha cifra estuvo un poco cerca de lo que estimó el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, que afirmó que en 2023 sería del 9,5%, cifra parecida a los resultados de la encuesta de expectativas que el Banco de la República hizo a analistas, quienes indicaron que la cifra había cerrado en 9,49%.

La entidad también había informado que para diciembre esperaba una inflación de 0,35%, como mínimo. Además, una media de 0,64% y un máximo de 0,91%.

De acuerdo con la presentación que hizo la directora técnica de la Dirección de Metodología y Producción Estadística del Dane, Andrea Ramírez Pisco, la reducción frente a 2022 se dio, principalmente, por la caída en la variación de la división de alimentos y bebidas no alcohólicas. Esta registró una variación de 5,00% y una contribución de 0,99% en 2023, mucho menor a 2022, cuando la variación resultó de 27,81% y la contribución de 4,88%.

Según el Dane, en esta división los que más aportaron al bajonazo fueron plátanos (-15,22%), cebolla (-18,76%), aceites comestibles (-7,64%) y papas (-9,76%).

En contraste, los que más subieron de precio fueron los derivados de tubérculos (27,85%) y leche en polvo para lactantes (24,94%). A su vez, los que más aportaron fueron leche (0,17%), frutas frescas (0,15%) y carnes de aves (0,12%).

En esta oportunidad, la variación anual se dio, principalmente, por la división de gasto de transporte, que cerró el año en 15,42%.

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