El artículo 56 de la nueva reforma laboral radicada en el Congreso de la República fueron desarrollados una serie de puntos nuevos que la diferencian del primer documento presentado. Allí se establece que se van a promover los empleos verdes y azules.
Teniendo en cuenta lo que se expone en dicho proyecto, los empleos verdes están dirigidos a la preservación del medio ambiente y a la generación de “trabajo digno y decente”.
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Además, se encuentra relacionado con la promoción del teletrabajo. Del mismo modo en la reforma radicada ante el Legislativo dice que se le quiere dar un “lugar protagónico y esencial al teletrabajo como mecanismo de generación de empleos verdes que permiten la inclusión laboral de personas vulnerables, el aumento de la productividad y la competitividad de las empresas, y la transición justa”.
Así mismo, los empleos azules, están basados en la perspectiva de promoción de agendas de empleabilidad que se encarguen de promover la protección y sostenibilidad ambiental de los espacios marinos en el desarrollo de empleos que respondan a lo que se conoce como justicia social y ambiental.
Sin embargo, en el proyecto radicado no se desarrolla a fondo esta idea o por lo menos de una manera específica, pero se dice que entre los cambios que traería sería la promoción e incentivación de este tipo de empleos, si se plantea una buena estrategia en cuanto a su promoción. Según Camilo Cuervo, socio de Holland & Knight, quien explicó que “la inclusión del artículo de empleos verdes y azules está relacionada con el objetivo de descarbonizar el sistema laboral y que están encaminados hacia la corresponsabilidad ambiental”, dijo a La República.
No obstante, también asegura que, a pesar de lo que se menciona en la reforma, “es un tema que quedó en desarrollo en el documento. Al parecer lo que el Gobierno pretende es dejar planteada la iniciativa para ampliar posteriormente. Hace falta aclarar los esquemas y manejos detrás de esta propuesta”.
Para Javier Almanza, quien es experto en derecho laboral de la Universidad del Rosario, resalta que “inicialmente la promoción de estos empleos no implica un cambio en el sistema laboral. No es una nueva categoría de contratos, sino que es la destinación de un contrato laboral a término fijo o indefinido para estas actividades. Lo que buscaría este tipo de categorización de trabajos sería la justicia social, que va con elementos de calidad, equidad e inclusión, respetando derechos laborales y de economía sostenibles”.
Del mismo modo, los expertos destacan que este artículo es coherente con los objetivos que han sido trazados por el Gobierno nacional en temas de transición energética. El artículo que habla de los empleo azules y verdes está relacionado con otros puntos en la reforma, como el 57 y el 62, en los que se habla de la promoción de diferentes modalidades de teletrabajo, así como avanzar en la descarbonización de la economía de nuestro país.
Para lograr implementar esta iniciativa el Sena será la entidad encargada de capacitar a los trabajadores. Aun cuando en el documento no se han desarrollado los cambios a fondo que traería consigo la promoción de este tipo de empleos, si se tiene en cuenta cómo se promoverán. “El Ministerio del Trabajo, a través del Sena, formará y capacitará a los trabajadores en torno a procesos productivos y capacidades en nuevos empleos verdes y azules, o empleos alrededor de la ecologización y la automatización de procesos”, resalta dicho artículo. Así mismo, se aclara que la capacitación será direccionada específicamente hacia los trabajadores que estén en los sectores económicos donde hay predominio de la transición en su proceso de empleo verde y azul.