Por qué motivo China envía a sus principales actores y directores a la escuela socialista

Por Simon Denyer y Luna Lin

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(REUTERS/Thomas Peter)

Beijing – La cultura es el alma de la nación. Eso es lo que dijo el presidente chino, Xi Jinping, en un discurso pronunciado hace unas semanas. Y al igual que Mao Zedong, Xi cree que la cultura china debe servir al socialismo y al Partido Comunista.

Recientemente, más de 100 de los principales cineastas, actores y estrellas del pop de la nación se reunieron por un día en la ciudad de Hangzhou para que se les dijera exactamente qué significaba eso en la práctica y para estudiar el espíritu del XIX Congreso del Partido, donde Xi expuso su "pensamiento sobre el socialismo con características chinas para una nueva era".

Una cultura socialista con características chinas, según el presidente de China, debe promover el bienestar material socialista, elevar los estándares ético-culturales socialistas y guiarse por el marxismo. Los escritores y artistas deben reflejar simultáneamente eso en la vida real y "ensalzar a nuestro Partido, a nuestro país, a nuestra gente y a nuestros héroes".

El presidente Xi Jingping es gran impulsor del resurgimiento y consolidación del pensamiento de Confucio (REUTERS/Jason Lee)

Este no es un tema nuevo para Xi (él hizo una llamada similar en un discurso en octubre de 2014) ni es una idea nueva para China. De hecho, Xi estaba evocando conscientemente las palabras del primer líder de la China comunista, Mao, quién le dijo a un foro de artistas en 1942 que el arte debía reflejar las vidas de la clase trabajadora y servir al avance del socialismo.

Pero el hecho de que los mejores artistas de la nación se hayan reunido específicamente para estudiar las palabras de Xi y alabar su guía representa otra vuelta de tuerca en el control del Partido Comunista en todos los ámbitos de la vida bajo este presidente. También llega en un momento en que el dinero chino está incursionando significativamente en Hollywood, lo que despierta la preocupación de que la propaganda china se filtre gradualmente en Estados Unidos.

La audiencia incluyó al cantante y actor Luhan, que tiene 42 millones de seguidores en weibo, el equivalente a Twitter en China. Bautizado como el Justin Bieber de China, posee un récord mundial de likes en las redes sociales, y ha logrado que 200,000 personas intenten comprar una revista de edición limitada de 20,000 ejemplares, con su rostro en la tapa, en tan solo un segundo.

El XVIII Congreso del Partido Comunista de China (Reuters/archivo)

Luhan es el embajador oficial de China para Star Wars y grabó el tema promocional chino de la película Stars Wars: The Force Awakens. En el foro, según los informes, expresó su orgullo por la "extensa y profunda" cultura china y se comprometió a promoverla en todo el mundo.

Yufan Huang tuiteó: "Imaginaos encerrar a Justin Bieber, Taylor Swift, Bruno Mars y muchos otros en una sala y pedirles que lean y elogien The Art of the Deal".

Según informaron los medios chinos, el foro fue aplaudido por las ideas y el entusiasmo de Xi y su intención de difundir la cultura socialista china en todo el mundo.

De hecho, esa es una diferencia entre Xi y Mao; no solo el actual presidente quiere que el arte sirva al socialismo, sino que quiere que el arte socialista mejore el poder blando de China en todo el mundo, de acuerdo a los expertos.

"Para marchar orgullosamente hacia la 'nueva era', primero debemos valorarla", dijo Wu Jing, director de artes marciales, actor y estrella de las películas de acción nacionalistas Wolf Warror. "Los extranjeros tienden a prestar una gran atención al mercado cinematográfico chino en lugar de hacerlo a las películas chinas… así que es importante para nosotros, en el negocio, usar nuestra sabiduría china para contar grandes historias chinas".

(AFP PHOTO / Greg Baker)

Pero fuera del foro, muchos artistas y escritores chinos dicen que los controles socialistas son sofocantes en lugar de sostener el alma creativa de la nación.

Hu Jie, un director de documentales independiente en Nanjing cuyo trabajo se centra en los tiempos turbulentos bajo el gobierno de Mao, dijo que requerir artistas para seguir la línea del partido no es compatible con el espíritu de creación independiente.

"El partido gobernante siempre ve todo como una forma de propaganda. Esto no es nuevo: es algo de nuestro pasado que regresa al presente. El control ha sido más flexible en el pasado, pero ahora se está volviendo a tensar", lamenta.