Ucrania confirmó que al menos 11 civiles murieron en la región de Lugansk, donde se encuentra Severodonetsk, la localidad cercana de Donetsk en la que Rusia a centrado su feroz ofensiva en este momento.
El gobernador regional de Lugansk, Sergiy Gaiday, dijo en una entrevista publicada en línea que las fuerzas invasoras habían capturado la mayor parte de Severodonetsk, pero que las fuerzas de Ucrania las estaban haciendo retroceder.
“El ejército ruso, como entendemos, está volcando todo su poder, todas sus reservas en esta dirección”, dijo Gaiday.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, dijo que “la situación en Severodonetsk, donde continúan los enfrentamientos callejeros, sigue siendo extremadamente difícil”, así como en otras ciudades de la región de Donbass.
Hay “ataques aéreos constantes, artillería y disparos de cohetes. A partir de esta mañana, el número total de varios misiles rusos utilizados contra Ucrania es de 2.503″, agregó Zelensky en su discurso vespertino.
Severodonetsk es la ciudad más grande que aún está en manos de Ucrania en la región de Lugansk, donde las fuerzas rusas han estado avanzando gradualmente en las últimas semanas después de retirarse o ser repelidas de otras áreas, incluso alrededor de la capital, Kyiv.
El ejército de Rusia afirmó que algunas unidades militares ucranianas se estaban retirando de la ciudad.
Las autoridades ucranianas anunciaron también este sábado la muerte de cuatro voluntarios militares extranjeros que luchaban contra las fuerzas rusas, pero no especificaron cuándo ni en qué circunstancias murieron.
La Legión Internacional de Defensa de Ucrania, una brigada oficial de voluntarios, nombró a los hombres y publicó fotos de ellos, diciendo que eran de Alemania, Holanda, Australia y Francia.
Ya se había informado de la muerte de los dos hombres nombrados de Holanda y Australia, y el Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia dijo el viernes que un combatiente voluntario francés había muerto en combate.
Ucrania también informó de dos víctimas de un ataque con misiles rusos en Odessa en el suroeste, sin especificar si estaban muertos o heridos.
El Ministerio de Defensa de Rusia dijo que había atacado un “punto de despliegue para mercenarios extranjeros” en el pueblo de Dachne en la región de Odessa.
También reclamó un ataque con misiles en la región nororiental de Sumy en un centro de entrenamiento de artillería con “instructores extranjeros”.
(Con información de AFP)
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