Las acciones de Saudi Aramco volvieron a dispararse 10% y la empresa superó los 2 billones de dólares en valor de mercado

El precio de las acciones de la petrolera saudita Aramco se disparó este jueves un 10%, el máximo autorizado, pocos segundos después de empezar su segundo día de cotización en la bolsa de Riad.

La subida permitió a la empresa alcanzar temporalmente una valorización de dos billones de dólares, el objetivo del príncipe heredero Mohamed bin Salmán, líder de facto del país. Sin embargo, luego el alza se moderó y, hacia el cierre de la jornada, rondaba un 5,5 por ciento.

El miércoles, la salida a bolsa del 1,5% del capital de Aramco se convirtió en la mayor de la historia. En su primera sesión de cotización, las acciones de Aramco subieron un 10%, pasando de 3,2 riales (0,85 dólares, su precio inicial), a 35,2 riales (9,4 dólares). La valorización total alcanzó 1,88 billones de dólares.

El tramo institucional recibió suscripciones institucionales 6 veces por encima de lo previsto, pero la respuesta ha sido fundamentalmente local. La salida a la bolsa ha conseguido dinero fundamentalmente de inversores saudíes y de la zona del golfo. Los inversores institucionales no saudíes representan el 23 %, según Samba Capital, que ha administrado la opv, aunque no ha especificado nacionalidades de inversores.

Se espera que la compañía pueda conseguir más fondos a través de diversas fórmulas y esté buscando la forma que permita involucrar a más inversores institucionales internacionales.

Por el momento, los 3.000 millones de acciones o 1,5 % de participaciones de la petrolera ya forman parte del mercado bursátil saudí, que ha debido incluso modificar su metodología interna para evitar que ninguna compañía represente más de un 15 % de sus índices y altere el mercado.

Los analistas más escépticos creen que el resultado de la operación servirá apenas para cubrir el enorme déficit presupuestario de Arabia Saudita durante un año.

La salida a bolsa se acompaña de presiones a la baja al precio del petróleo a causa de la debilidad de la economía mundial, consecuencia de la guerra comercial entre Estados Unidos y China y de la producción récord de los exportadores de petróleo de países que no son miembros de la OPEP.

(Con información de EFE y AFP)

MÁS SOBRE ESTE TEMA: