Desde hace un tiempo es viuda. Pero durante años acompañó a un ser siniestro sin levantar la voz. Sin denunciarlo. Sin dar a conocer qué hacía. Hoy es identificada como "la mujer de púrpura" por los investigadores británicos que intentan determinar qué ocurrió con Madeleine McCann la noche del 3 de mayo de 2007, cuando desapareció de un resort veraniego en Praia da Luz, en el sur de Portugal.
La pista fue dada por Jenny Murat, un inglés que la noche de la desaparición de Maddie vio a la mujer intentando abrir puertas del complejo hotelero donde se alojaban varias familias británicas. La sospechosa, cuyos movimientos fueron estudiados por los detectives durante largo tiempo, vive actualmente en Bulgaria, donde perdió a su marido, un reconocido pedófilo con antecedentes.
Ambos —la mujer y su por entonces pareja— estaban en Portugal cuando ocurrió el hecho que conmovió a la opinión pública del Reino Unido, pero también al planeta. Poco tiempo después de conocerse la desaparición de Maddie, huyeron del país sin dejar rastros, de acuerdo con el Daily Mail.
Murat explicó qué fue lo que observó la fatídica noche: "Vi a la mujer parada en la esquina. Llamó mi atención porque ella estaba vestida toda de púrpura. Me pareció extraño. Me pareció raro, particularmente para una mujer, estar parada sola en la calle de nuestro resort, solo mirando el edificio".
"La mañana siguiente, escuchamos que una pequeña niña se había perdido, y luego le dije a la policía acerca de la mujer que había visto afuera. No la reconocí y no tenía una pista de quién podía ser, pero parecía un poco sospechosa", agregó el testigo.
Lo cierto es que ahora, el cuerpo de investigadores que mantiene con vida las pericias en torno a qué pudo ocurrir con Madeleine está en Bulgaria, en búsqueda de esta misteriosa mujer que podría arrojar luz sobre el caso más emblemático de desaparición de niños de las últimas décadas. Y quizá, la última oportunidad para saber qué ocurrió con la pequeña, diez años después de su misteriosa partida.
Se cree que la pista de "la mujer de púrpura" es la que posibilitó que el caso se mantuviera con vida, luego de los recortes que la investigación sufrió al no encontrarse resultados. De un equipo de 31 agentes, el gobierno británico dispuso que solo cuatro mantengan sus puestos. Hasta el momento más de 600 personas estuvieron en el foco de los detectives alrededor del mundo, incluyendo sospechosos en Brasil, Paraguay, la India, Nueva Zelanda, Alemania y Marruecos.
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