Estados Unidos creó 1.763.000 puestos de trabajo en julio y el desempleo cayó al 10,2%

El gobierno afirmó que el resultado se debió a la reapertura gradual de la economía tras las restricciones impuestas por la pandemia de coronavirus

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Estados Unidos creó 1.763.000 puestos de trabajo en julio (EFE/EPA/JUSTIN LANE/Archivo)
Estados Unidos creó 1.763.000 puestos de trabajo en julio (EFE/EPA/JUSTIN LANE/Archivo)

El índice de desempleo en Estados Unidos bajó en julio al 10,2 % frente al 11,1 % del mes anterior, como resultado de la reapertura gradual de la economía tras las restricciones impuestas por la pandemia de coronavirus, informó este viernes el Departamento de Trabajo.

El pasado mes se crearon casi 1,8 millones de nuevos puestos de trabajo, por encima de las previsiones de los analistas, que anticipaban 1,6 millones de nuevos empleos. El número de pérdidas permanentes de empleo cambió poco en julio después de cuatro meses consecutivos de aumentos.

Cerca de un tercio de estos nuevos puestos de trabajo, casi 600.000, se generaron en el sector de la hostelería, uno de los más afectados por los cierres provocados por la pandemia.

El salario medio, por su lado, subió en julio en 7 centavos de dólar la hora, hasta los 29,39 dólares.

Mientras, la tasa de participación en la fuerza laboral, es decir, la proporción de estadounidenses que se encuentran empleados o buscando empleo, se redujo levemente en julio al 61,4 %, frente al 61,5 % del mes precedente. Pese al repunte, aún 16,3 millones de estadounidenses siguen sin empleo.

El dato se conoce días después de que expirara el subsidio adicional de desempleo creado en marzo por el Congreso y promulgado por el presidente Donald Trump.

Ese beneficio, de 600 dólares semanales, supuso el salvavidas para muchas familias estadounidenses y por el momento los legisladores demócratas y republicanos del Congreso no han logrado ponerse de acuerdo para extender el programa.

Un negocio que está a punto de cerrar en Winnetka, Illinois, el 23 de junio del 2020. (AP Photo/Nam Y. Huh)
Un negocio que está a punto de cerrar en Winnetka, Illinois, el 23 de junio del 2020. (AP Photo/Nam Y. Huh)

EEUU aprobó entonces un paquete de estímulo económico de 2,2 billones de dólares, el mayor de la historia moderna del país, con el objetivo de contrarrestar los efectos de la pandemia del coronavirus, pero la gravedad de la situación ha demostrado que fue insuficiente.

Los números de hoy se dieron a conocer luego de que la cifra de pedidos de subsidios estatales por desempleo bajara en la última semana, tras dos reportes que interrupieron la tendencia en descenso, pero se mantiene en niveles históricamente altos.

Los pedidos iniciales de ayuda por desocupación totalizaron una cifra de 1.186.000 en la semana al 1 de agosto, desde los 1,4 millones de la semana previa, dijo el jueves el Departamento del Trabajo. Economistas consultados por Reuters calculaban 1,415 millones para este reporte.

El número de trabajadores que está recibiendo ayuda cayó a 16,1 millones, una cifra casi 10 veces mayor que hace un año. En tanto, cuando se combinan todos los programas de asistencia y beneficios por desempleo, un total de 31,2 millones de ciudadanos recibían ayuda hasta la semana terminada el 18 de julio, una cantidad 18 veces mayor que la que había en julio de 2019 (1,7 millones).

Muchos hogares ya están sintiendo esta caída de los ingresos. Más de 13 millones de ciudadanos que viven de alquiler, o casi el 20% de los hogares arrendados en el país, no pagaron la factura de junio, según una encuesta realizada el mes pasado por la Oficina del Censo de Estados Unidos. Alrededor de un tercio de los inquilinos dijeron tener poca o ninguna confianza en su capacidad para pagar el alquiler en agosto, según la encuesta.

La pérdida de empleos causada por los confinamientos impuestos en marzo y abril por todo el país para contener la propagación del nuevo coronavirus afectó de forma desproporcionada a los trabajadores con salarios bajos, quienes viven de alquiler en una mayor proporción.

Los estadounidenses debían más de 21.500 millones de dólares en alquileres atrasados a finales de julio, según estimaciones de la firma de asesoría global Stout, Risius and Ross. Esta cifra aumentará si quienes siguen desempleados no reciben más ayudas, afirman expertos en legislación inmobiliaria, economistas y propietarios.

Este problema va a crecer a medida que avance el año”, dijo Marietta Rodríguez, presidenta y directora ejecutiva de NeighborWorks America, una organización sin ánimo de lucro que lucha por el derecho a viviendas asequibles.

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