Seminarista extranjero abusaba de un menor en Antioquia

El ciudadano guatemalteco Manuel Antonio Gutiérrez Galicia fue condenado a pagar nueve años y dos meses de prisión por parte de un juez penal del Circuito de Itagüí, en Antioquia, luego de ser acusado de abusar sexualmente de un menor de edad. El hombre fue señalado de cometer actos sexuales abusivos con menor de 14 años agravado. La Fiscalía General de la Nación aclaró que la condena es de primera instancia y que, contra ella, proceden los recursos de ley.

De acuerdo con lo que quedó expuesto en la investigación, liderada por un fiscal del Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual (Caivas), el extranjero abusó sexualmente de un niño de 12 años, entre julio y agosto del 2020, en un internado religioso ubicado en el municipio de La Estrella, en el Valle de Aburrá.

Según la indagación en su contra, el hombre de 43 años habría “aprovechado su condición de seminarista y formador para ingresar al dormitorio de la victima y cometer actos contra la formación e integridad sexual del menor de edad”. Se supo que el señalado abusador le habría dado un videojuego al niño para persuadirlo de denunciarlo.

La decisión fue tomada por un juez penal del Circuito de Itagüí y apelada en primera instancia por la defensa del seminarista ante la sala penal del Tribunal Superior de Medellín, tal y como lo explicó el director de la seccional Medellín de la Fiscalía, Ricardo Romero Moreno.

Gutiérrez Galicia fue capturado en noviembre de 2017, sin embargo, el Juzgado Primero Promiscuo Municipal de La Estrella lo cobijó con medida de aseguramiento domiciliario. En su momento, la decisión tomada por el Juzgado Primero Promiscuo Municipal de La Estrella, fue apelada en su momento por el ente investigador.

Esta denuncia se suma a la decisión que se tomó, el mes pasado, en contra de Giovanny Vega Blanco, entrenador de la Liga de Atletismo de Santander. Desde 2014, dice la investigación, habría empezado a tener comportamientos y acciones abusivas sexualmente en contra de sus deportistas en formación, la mayoría menores de edad. Fue hasta 2021, sin embargo, que la Fiscalía General de la Nación, luego de recibir unas 30 denuncias, decidió iniciar las investigaciones del caso.

Según las autoridades, de las casi 30 denuncias se desestimaron 10 debido a que no fueron consideradas como abuso sexual, sino como violencia deportiva. “Hubo episodios donde me bajaba la pantaloneta, me tocaba la cola, mis partes íntimas (...) Si no accedía la carga era durísima y había maltrato psicológico decía que lo dejaba a uno en la materia, pero si accedía a sus pretensiones entonces lo ponía a uno a dirigir y era suave; a mi muchas veces me decía córrale, usted es una bruta, los insultos de él eran fuertes porque no quise acceder a que me tocara”, aseguró una de las denunciantes para Blu Radio.

En RCN Mundo otra de las víctimas relató como a sus 15 años el entrenador se aprovechó de una dolencia física que padecía: “Yo tuve una lesión en la espalda y eso se lo manifesté al entrenador, quien me dijo que me masajeaba, cosa sobre la cual nunca vi inconveniente. Sin embargo, empezó a bajar la licra más allá de lo normal, lo mismo que la ropa interior”.

Las denuncias fueron apoyadas por la Liga de Atletismo, presidida por Juan Gabriel Henao, que reconoce la afectación que generó en los jóvenes deportistas este hecho, incluso algunos de los afectados siguen entrenando, si bien muchos casos son de vieja data.

“Varias jóvenes continuaron entrenando, para ellas no ha sido fácil porque se han deprimido, pero han contado con el apoyo de las instituciones. Cabe señalar que solo algunas siguen activas en la Liga, porque hay otras que hacían parte de ella hace 10 o 12 años, hay casos de abuso de hace muchos años”, destacó.

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