Bisáu, 15 dic (EFE).- El Gobierno de Guinea-Bisáu, dirigido por una junta militar desde el golpe de Estado del pasado 26 de noviembre, anunció este lunes la suspensión inmediata de todas sus actividades en la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP).
En un comunicado oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores dirigido a la Secretaría Ejecutiva de la CPLP, el Gobierno guineano justifica la decisión por las "reiteradas violaciones de los estatutos" de la organización lusófona y por el "no reconocimiento" del país como actual presidente del bloque.
Esta suspensión, sin precedentes en la historia de la organización fundada en 1996, provoca una grave crisis institucional dentro de la CPLP y pone en entredicho el normal funcionamiento y la cohesión del bloque lusófono.
Guinea-Bisáu, miembro fundador de la CPLP, acusa a la organización de excluir al país de las reuniones y los procesos de toma de decisiones, actos que considera una "clara violación de los Estatutos que consagran la igualdad soberana, la plena participación y la coordinación político-diplomática entre los Estados miembros".
"La falta de respeto mostrada a la Presidencia de la CPLP por Guinea-Bisáu constituye una grave afrenta a la legitimidad institucional del Estado", afirma la nota diplomática, subrayando que esta postura "compromete la credibilidad de la organización ante sus Estados miembros y la comunidad internacional".
Hasta la fecha, la Secretaría Ejecutiva de la CPLP no se ha pronunciado oficialmente sobre la notificación del Gobierno guineano.
Los militares dieron el pasado 26 de noviembre un golpe de Estado en Guinea-Bisáu, donde fue derrocado el presidente Umaro Sissoco Embaló, quien huyó al extranjero, y al día siguiente su exjefe de Estado Mayor, el general Horta N'ta, fue nombrado como “presidente de transición” por un año.
Guinea-Bisáu es uno de los países más inestables de África, ya que ha sufrido cinco golpes de Estado exitosos desde su independencia de Portugal en 1974 (1980, 1998/99, 2003, 2012 y 2025), además de numerosas intentonas golpistas. EFE