El exdirector de energética estatal polaca bajo sospecha por una estafa multimillonaria

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Cracovia (Polonia), 29 abr (EFE).- Daniel Obajtek, exdirector de Orlen, la mayor empresa estatal de Polonia, está bajo sospecha por su presunta responsabildiad en un supuesto fraude multimillonario de compra de petróleo.

Obajtek, que dirigió durante años el mayor conglomerado energético de Europa del este, fue señalado este lunes por el primer ministro polaco, el liberal Donald Tusk, como posible culpable de la firma de un contrato por valor de más de 350 millones de euros para comprar petróleo a una empresa fantasma.

Además, se encuentran bajo sospecha sus vínculos con un ciudadano libanés supuestamente vinculado al grupo chií Hizbulá.

En un mensaje publicado en redes sociales, Tusk afirmó haber convocado al fiscal general del Estado, Adam Bodnar, para que acuda a su oficina a recibir las pruebas del fraude necesarias para abrir una investigación.

"Los polacos deben saber la verdad", escribió Tusk, sobre "un asunto de importancia clave para el Estado, la pérdida de miles de millones de dólares y los posibles vínculos con Hizbulá del exjefe de Orlen".

Obajtek ha rechazado hoy cualquier acusación sobre su gestión de la empresa estatal durante los últimos años y ha acusado a los servicios secretos de presentar pruebas falsas contra él.

Según la información publicada por la prensa polaca, el exdirector de Orlen, cuyo nombramiento por parte del anterior Gobierno ultraconservador fue muy criticado por su escasa trayectoria empresarial previa, ordenó cerrar un trato con un proveedor de petróleo radicado en China y que actuaba a través de una compañía de Oriente Medio que resultó ser una única persona, un joven de 25 años.

Para llevar adelante las gestiones, Orlen creó en Suiza la empresa Orlen Trader Switzerland (OTS) y puso al frente de ella al libanés Samir A., pese a que lo desaconsejaban los servicios secretos polacos por considerar probados los vínculos de este último con Hizbulá.

Tras efectuarse el pago de adelantos, derechos de almacenaje y comisiones por un total de unos 400 millones de euros, la empresa contratada nunca llegó a suministrar el petróleo y Orlen declaró en su balance unas pérdidas por valor de esa cantidad, sin especificar la causa. EFE

cph/psh