Niños raudos y veloces: cómo elegir el mejor patinete

Compartir
Compartir articulo
ILUSTRACIÓN - El patinete debe adaptarse bien al tamaño corporal de los niños. Foto: Mascha Brichta/dpa - ATENCIÓN: Sólo para uso editorial con el texto adjunto
ILUSTRACIÓN - El patinete debe adaptarse bien al tamaño corporal de los niños. Foto: Mascha Brichta/dpa - ATENCIÓN: Sólo para uso editorial con el texto adjunto

Pasar el peso a una sola pierna, tomar impulso desde el piso con la otra... y salir disparado. Quien alguna vez haya intentado seguir, con la lengua afuera, a un niño en patinete o monopatín, sabe qué tan rápidos son cuando se suben a ellos. Por eso es importante encontrar un modelo seguro y adecuado para cada edad. ¿A qué prestar atención entonces?

Desde el punto de vista médico, hay muchas cosas a favor del uso del monopatín: "Los niños entrenan con él el dominio del cuerpo. Además, el monopatín fortalece la musculatura de las piernas, el abdomen y la espalda", dice Christopher Spering, médico jefe en la clínica de cirugía de accidentes, ortopedia y cirugía plástica en Gotinga, Alemania.

Así y todo, los niños deben ser cuidadosos. Nunca deben salir a andar en patinete solos, porque para ellos es difícil estimar y predecir cómo actuarán los otros participantes en el tránsito.

"El espacio para transitar está cada vez más lleno. Ahora se sumaron los patinetes y bicicletas eléctricas. Por eso es importante que siempre haya presente un adulto", afirma Spering.

Además, Spering aconseja que los niños usen protectores para los codos y las rodillas. Pero esto tampoco alcanza. "Cuando los chicos son más grandes, son más veloces y tienen mayor presencia en el tránsito callejero. Por eso es importante que usen casco", añade.

Más allá de la protección que se le pueda suministrar al niño, también hay que tener en cuenta las propiedades del patinete o monopatín. Antes de decidir acerca del tamaño perfecto o el mejor manubrio, hay que pensar en el número de ruedas.

Los modelos con tres ruedas son más estables

Por lo general hay modelos con dos ruedas, que pueden ser usados en parte para actividades deportivas, y modelos con tres o cuatro ruedas que brindan mayor estabilidad pero están pensandos para niños más pequeños.

Para los chicos más grandes, estos patinetes son demasiado simples, por eso prefieren los de dos ruedas, lo que por otra parte contribuye a su desarrollo físico y motor.

En todo caso, es importante que las ruedas delanteras tengan como mínimo un promedio de 120 milímetros. Esto hace que sean más estables y sea más fácil sortear obstáculos con ellas, como por ejemplo caminos con muchas irregularidades.

También es importante el material de las ruedas. Por lo general, son de materiales plásticos o de goma.

Los patinetes de metal pesan más

Por lo general, los monopatines son de aluminio, metal o plástico. Los de metal son muy estables y aguantan algunas cosas, pero son relativamente más pesados y por eso más adecuados para niños algo más grandes y fuertes.

Para los niños más pequeños, son ideales los patinetes de plástico o aluminio. Otra ventaja de este tipo de monopatines es que no se oxidan.

El manubrio adecuado también ayuda a que la experiencia sea placentera. Si está muy alto o muy bajo, será incómodo usar el monopatín. Además, es más fácil cansarse cuando la altura no se corresponde con el tamaño del cuerpo.

La ventaja de un manubrio regulable es que se lo puede ir adaptando a la altura del niño, lo que permite usar el patinete por más tiempo. Una de las reglas básicas para padres es que todos los manubrios que se pueden regular unos 10 centímetros harán que el monopatín les dure más tiempo a sus hijos.

Los frenos en la rueda trasera pueden recalentarse

Los frenos brindan especial seguridad. A veces se activan con el pie, en la rueda trasera, o con la mano en el manubrio. Cuando se frena con la rueda trasera es importante no usar el freno estando descalzo, ya que, a una velocidad alta, este puede recalentarse.

dpa