EE.UU. pierde con medida de Trump para congelar visas: Tae Kim

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(Bloomberg) -- La máquina de innovación de Silicon Valley es la envidia global. Es a donde van los emprendedores más ambiciosos para comenzar sus empresas que cambian el mundo. Pero la última acción del presidente Donald Trump para restringir la inmigración puede arriesgar innecesariamente el futuro de este activo estratégico clave. Quizás, en cambio, no deberíamos meternos con algo que está funcionando.

El lunes, Trump firmó una orden ejecutiva que congela el acceso a una serie de visas de trabajo hasta fin de año, incluida la visa H-1B para extranjeros altamente calificados, que se otorga principalmente a trabajadores de la industria de la tecnología. La emisión de nuevas tarjetas verdes también se detendrá hasta fin de año. La Administración dijo que la orden liberaría empleos para los desempleados estadounidenses y agregó que impediría la entrada al país a aproximadamente 500.000 personas este año.La medida provocó una avalancha de críticas por parte de las empresas de tecnología. Dijeron que afectará su capacidad de reclutar talentos y tendrá ramificaciones negativas más profundas para la economía. Un portavoz de Amazon.com Inc. calificó la orden de “miope” y agregó que impide que “profesionales altamente calificados ingresen al país y contribuyan a la recuperación económica de Estados Unidos, [poniendo en riesgo] la competitividad global del país”. Un representante de Facebook Inc. dijo que Trump está utilizando la pandemia como justificación para “limitar” la inmigración, lo que hará que “la recuperación de nuestro país sea aún más difícil”. Y el presidente de Microsoft Corp., Brad Smith, dijo en las redes sociales, “ahora no es el momento de separar a nuestra nación del talento mundial o crear incertidumbre y ansiedad”.

Las grandes tecnológicas tienen razón. Una de las mayores ventajas de Estados Unidos es su próspero ecosistema de innovación y liderazgo técnico en torno a sus grandes empresas tecnológicas y emprendimientos. Es impulsado por ingenieros pioneros inmigrantes que vienen de todo el mundo. Según la última presentación de “Tendencias de Internet” de Bond Capital, aproximadamente el 60% de las empresas de tecnología más valoradas de Estados Unidos fueron fundadas por estadounidenses de primera o segunda generación. Por ejemplo, la matriz de Google, Alphabet Inc., con su valoración de mercado de billones de dólares, fue iniciada por Sergey Brin, un inmigrante ruso de primera generación. Y el fundador de Nvidia Corp., Jensen Huang, emigró de Taiwán. El Gobierno debería considerar el hecho de que el empleo no es un juego de suma cero. Si bloquean la entrada del próximo gran fundador inmigrante, también podríamos perder una gran cantidad de empleos.

Las empresas fuera de EE.UU. ya conocen esta realidad y están compitiendo para aprovecharla. El director ejecutivo de Shopify Inc., Tobias Lutke, cuya compañía tiene su sede en Canadá, tuiteó: “si esto afecta sus planes, considere venir a Canadá. Shopify está contratando en todo el mundo y tenemos mucha experiencia ayudando con la reubicación”. Un socio de una firma de capital de riesgo con sede en el Reino Unido ensalzó las virtudes del programa de “visa de talento global” de su país. Entonces, basta con decir que otros están más que dispuestos a recoger a los inmigrantes talentosos del mundo.

Lamentablemente, los cambios en la política de inmigración de Trump pueden haber causado un daño duradero en el futuro de la industria tecnológica de Estados Unidos. Los posibles inmigrantes ahora pueden decidir ir a otro lugar en medio de la incertidumbre provocada por las suspensiones de visas. ¿Por qué arriesgarse a desarraigar a su familia y su carrera si las reglas pueden cambiar por capricho de una orden ejecutiva? El cofundador del emprendimiento de software en la nube Databricks, Reynold Xin, dice que su compañía, que ahora emplea a 1.400 personas, tiene cuatro fundadores inmigrantes que se mudaron a Estados Unidos para “trabajar con las mejores mentes del mundo”. Pero la historia de éxito no habría sucedido en EE.UU. si iniciaran la compañía en 2020, agregó.

Eso es un problema. Si EE.UU. no atrae a los fundadores del próximo Google o Databricks como la tierra de oportunidades preeminente, solo alentará a sus mayores rivales, como China y Europa. Repeler a los mejores y más brillantes de nuestras costas durante cualquier período simplemente un comportamiento autodestructivo y dañará nuestra competitividad. Es un riesgo tonto.

Nota Original:Big Tech Isn’t the Only Loser in Trump’s Visa Freeze: Tae Kim

©2020 Bloomberg L.P.