Terrorismo iraní: EEUU desarticuló un complot para matar a un embajador

Dos sujetos que responden a las Guardias Revolucionarias de Ahmadinejad iban a asesinar a un diplomático saudita. Y planeaban atentados en Washington y Buenos Aires. Desde la República Islámica calificaron la acusación de "conspiración maligna"

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Las primeras informaciones indican que el embajador Adel Al-Jubeir se encontraba en los Estados Unidos en momentos en que se pensaba atentar contra su persona. Pero de acuerdo con la cadena ABC, fuentes del FBI y de la DEA indicaron que las embajadas de Israel y Arabia Saudita también eran señaladas como posibles lugares donde colocar bombas. Dijeron, además, que en el complot se discutió ataques contra las sedes diplomáticas de esos países en Buenos Aires, Argentina.

El fiscal general Eric Holder (foto) explicó que el plan era "auspiciado, dirigido y financiado" directamente por Irán y representa una flagrante violación a la ley internacional. Añadió que el gobierno de los Estados Unidos espera reunirse con representes de sus agencias antes de anunciar acciones contra Teherán. Medios estadounidenses informaron que se podrían anunciar nuevas sanciones por parte del Departamento de Estado y también del Tesoro, pero la secretaria de Estado Hillary Clinton indicó que consultarán a sus "países amigos y aliados sobre cómo enviar un fuerte mensaje (señalando que) este tipo de acciones, que violan las normas internacionales, deben terminar".  

Holder precisó que para su complot, los iraníes -con conexiones en las oficiales Guardias Revolucionarias- contactaron a un agente encubierto estadounidense en México que se hacía pasar por un miembro del cártel de Los Zetas y a quien le habrían pagado un adelanto 100 mil dólares del total de 1,5 millones de dólares que prometieron para realizar el ataque.

El detenido en Nueva York es Mansor Arbabsiar, un iraní de 56 años que poseía también pasaporte de los EEUU. El otro involucrado, Gholam Shakuri, se encontraría en territorio iraní. Además de conspiración, se los acusa por uso de armas de destrucción masiva. 

Las autoridades dijeron que Arbabsiar -quien mantuvo varias entrevistas con el agente encubierto y fue detenido a fines de septiembre- admitió que recibía órdenes de un alto mando del partido gobernante iraní y que tenía contacto con las Guardias Revolucionarias. Tras el anuncio de Holder, un asesor del presidente Mahmoud Ahmadinejad negó las acusaciones.  Además, en un comunicado de la legación saudita en Washington, el país calificó de "despreciable" el complot y agregó que viola "la normativa internacional, los estándares y convenciones y no está en consonancia con los principios de humanidad".

La operación conjunta de la DEA y el FBI, nombrada Coalición Roja, comenzó en Mayo y el presidente Barack Obama estaba al tanto de cada paso.

Días atrás, un senador republicano pidió investigar a los cárteles del narcotráfico mexicanos al sospechar que tenían vínculos con terroristas islamitas.

La embajada israelí en Buenos Aires fue atacada en 1992, mientras que otro edificio de la comunidad judía, la AMIA, sufrió un atentado en 1994. Irán fue señalado como el principal sospechoso en ambos casos.

Irán: "Conspiración maligna"

Irán afirmó que la acusación de un plan para matar al embajador de Arabia Saudita en Washington era una "conspiración maligna" de parte de Estados Unidos, en una carta de protesta enviada la noche del martes a la Organización de Naciones Unidas.

En esa carta, enviada al secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, y al Consejo de Seguridad, el embajador de Teherán ante el gobierno norteamericano, Mohammad Khazaee, acusó a Israel de haber ejecutado el asesinato de científicos nucleares iraníes con la asistencia de Estados Unidos.

"Irán condena categóricamente y en los términos más enérgicos esta vergonzosa acusación de Estados Unidos y la deplora como una bien pensada conspiración maligna en línea con su política anti-iraní", afirmó Khazaee.

Khazaee expresó su enérgico rechazo por las acusaciones en su carta al Consejo de Seguridad de la ONU, donde Irán enfrenta una creciente presión por su programa nuclear. El Consejo de Seguridad ha impuesto cuatro rondas de sanciones por el rechazo de Irán a detener el enriquecimiento de uranio.

"Este tipo de declaraciones buscan desviar la atención de los problemas económicos y sociales de la actualidad dentro del país y las revoluciones populares y protestas contra los regímenes dictatoriales en el exterior apoyados desde hace mucho tiempo por Estados Unidos", afirmó el diplomático.

"Irán siempre ha condenado el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones", y ha sido una víctima, agregó. "Un claro ejemplo reciente de esto es el asesinato de una cantidad de científicos nucleares en los últimos dos años llevados a cabo por el régimen sionista y apoyado por Estados Unidos".

Un profesor de física de la Universidad de Teherán fue asesinado en un ataque con bomba en su casa en enero de 2010. Otro científico fue abatido en Teherán el 29 de noviembre, mientras que el jefe de asuntos nucleares Fereydoon Abasi Davani sobrevivió a un intento de asesinato ese mismo día.

Las autoridades estadounidenses señalaron más temprano que habían descubierto una conspiración del gobierno iraní para asesinar al representante de Arabia Saudita en Washington, Adel al-Jubeir. La administración de Estados Unidos ha prometido hacer responsable a Irán.

Dos hombres están acusados de conspirar con facciones del gobierno de Irán para conducir el ataque y uno de ellos está detenido en Estados Unidos.