A un mes de sancionada la "Ley de víctimas" reina la desconfianza: “Ya veremos si todos somos iguales para la Justicia”

El miércoles 21 de junio pasado la Cámara de Diputados sancionó el proyecto de ley que exigía las garantías para las victimas de la inseguridad luego de que el Senado le diera media sanción el año pasado. El proyecto plantea la creación de Centros de Protección y Asistencia a las Víctimas en todo el país y establece que quienes sufran delitos tienen que ser notificados sobre las excarcelaciones, los permisos de libertad condicional o las salidas transitorias que se le otorguen a los condenados y acusados. La principal modificación fue introducida por el Senado y proponía la creación de la figura del defensor público de víctimas, cargo que ocupará un magistrado por cada provincia y la Ciudad de Buenos Aires, 24 en total. Además, habrá 123 prosecretarios y secretarios letrados que pasarán a ser nombrados con el cargo de defensores coadyuvantes, a las órdenes de los 24 defensores públicos de las víctimas.

Sobre esta ley opinó Graciela Pera, madre de Matías Díaz, asesinado con motivo de robo en 2004, y presentó el libro en el que cuenta todo lo que debió padecer luego del crimen de su hijo. "S.O.S Víctimas" es el descargo y análisis de una madre que no deja de caminar los pasillos de los órganos del Poder Judicial reclamando lo que ellos están obligados a dar: justicia.

La gran incógnita que plantea Pera: ¿Los Derechos Humanos se ocupan más de los delincuentes que de las victimas?

La que antecede es una de las tantas preguntas retóricas que se hace Pera y que responde según su análisis y experiencia en su segundo libro, a modo de catarsis. Su vida de ama de casa cambió cuando supo que su hijo había sido baleado en 2004 y que un proyectil le perforó la aorta mientras trabajaba. En medio del dolor y la soledad judicial debió aprender a caminar los pasillos de los tribunales y aprendió las leyes, las que se cumplen, las que se omiten y las que se debería implementar.

Respecto de la ley mencionada, valoró: "Lo más importante es el abogado gratuito para la víctima, desde el inicio y hasta el fin del proceso, y que la victima pueda participar en el proceso penal desde el inicio hasta la etapa de Ejecución de la Pena. No es 'la ley', pero nombra mucho a las víctimas y eso nos hace dar un paso adelante, pero me preocupa un poco la parte que se refiere al abogado gratis. Esto es personal porque habla de vulnerabilidad, en el sentido de vulnerabilidad económica… Y ahí me preocupa porque lo que pretendía es que la víctima tenga un abogado gratuito desde el inicio, al igual que lo tiene, que siempre lo tuvo, el delincuente. Para mi eso no está muy claro y temo que empiecen con que si tenés una pequeña propiedad o un autito no corresponde…".

Sobre ese punto también reflexiona Pera en S.O.S Victimas, texto en el que se posiciona como lo que es: una madre que perdió a su hijo víctima de un homicidio a sangre fría en ocasión de robo. En ese contexto, continuó: "Si bien es un paso adelante, no es lo que nos dice y no va a ser tan automático…  —desconfió—Hasta que no haya otra víctima, porque lamentablemente la habrá, no sabremos cómo será veremos su aplicación y si es verdad que hay igualdad ante la ley".

En su relato, la mujer hizo un repaso del camino andado, para que se logre esa sanción, y que se inició hace casi 20 años. "No hay que olvidar que hay gente que desde hace 18 o 20 años están pidiendo por los derechos de las víctimas. Derechos como abogado gratuito, contención con psiquiatra o psicólogo porque las víctimas no están en condiciones de afrontar todo solas en ese momento cuando, en el mejor de los casos, hay que ir a reconocer a los hijos a una morgue y al salir de ahí no hay profesionales que contengan a los familiares".

La desconfianza de Pera sobre cómo se implementará la norma recae directamente sobre las interpretaciones que los magistrados hagan de ella, pero también otro punto la preocupa: "Tampoco se entiende cuando dice: 'También podrá opinar sobre las etapas del proceso'… Lo pregunté varias veces, porque una cosa es opinar y otra muy distinta ser parte… Cuando llegue el momento veremos si la víctima tiene que ir al CPV, si tiene el abogado gratis automáticamente o si antes le van a investigar el patrimonio".

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"Pido socorro porque las víctimas seguimos desprotegidas"

En ese tono, se quejó de la sobre abundancia de leyes existentes que no se cumplen. "No se si es un capricho o qué, no lo entiendo. Esta ley es para conformar a las víctimas, es un paso, pero esto no es la panacea… Hay cosas que estaba y las dejaron morir, como los CPV (Centro de Protección para las Víctimas) y ahora las vienen a reflotar pese a que desde, al menos, 18 años hay familiares que pelean para que esto suceda, no es de ahora".

Considerando todos estos aspectos, Pera escribió el libro que nace de sus propios interrogantes y que denodadamente busca respuestas en la justicia.

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