Kangaroo y Possum, los huérfanos que se encontraron para salvarse

Kangaroo es un gato grisáceo que fue rechazado por su mamá después de que nació y llegó a las manos de Emilie Rackovan una rescatista de animales que procura y cuida a las criaturas más necesitadas. Este suceso coincidió con la historia de Pollum, un cachorro de perro que también fue ignorado por su camada y encontró en el felino un compañero de vida.

Las dos criaturas a su corta vida comparten historias similares y lograron reponerse al rechazo de los suyos cuando se conocieron en el refugio de su rescatista. Rackovan alimentó con biberón al gato esperando que pudiera crecer lo más pronto posible, pero durante todo este proceso la criatura estuvo llorando porque quería un compañero.

La rescatista explicó en entrevista para Love Meow que se enteró del caso de Pollum gracias a la administración de un refugio que se puso en contacto con ella para pedirle ayuda. El perro formó parte de una camada de ocho cachorros y destacó entre los demás porque nació débil y su tamaño era la tercera parte de sus hermanos.

Emilie Rackovan detalló que Kangaroo nació en un garaje, su mamá forma parte de una familia en Milwaukee y dio a luz una camada de siete felinos. Los propietarios de la gata no podían hacerse cargo de los recién nacidos y se pusieron en contacto con la rescatista para pedir ayuda.

La gata que se convirtió en mamá solo permitió que se llevarán a Kangaroo, la mujer consideró que el motivo detrás de esta decisión es que sólo quería hacerse cargo de los hijos que tuvieran mayor probabilidad de supervivencia.

Possum nació en el Control de Animales Local de Milwaukee, los encargados del centro canino no pudieron hacerse cargo de los recién nacidos y Emilie Rackovan alzó la mano para cuidar de ellos. “Cuando los recogí, me di cuenta que el enano tenía aproximadamente un tercio del tamaño de los demás y era muy delgado”, comentó la rescatista para el blog Love Meow.

El cachorro recibió la misma atención que el gato, los dos necesitaban la calidez y compañía que no recibieron por su familia. Rackovan detalló que es normal que las crías abandonadas encuentren consuelo con otro animal sin importar la especie, pero esta situación es emocional porque sus historias son idénticas.

“Es adorable verlos formar esta amistad. Les encanta acurrucarse y dormir acurrucados el uno junto al otro”, compartió. Possum y Kangaroo fueron colocados en una incubadora, el gato dejó de maullar y el perro dejó de llorar en cuanto estuvieron juntos.

Las dos criaturas han ganado peso gracias a los cuidados de su rescatista y Rackovan ha intentado reintegrar al felino a su camada, sin embargo aún necesita alimentación suplementaria. Mientras Kangaroo está recibiendo su tratamiento, Possum le hace compañía a la hora de dormir y durante toda la noche.

La rescatista considera que este caso enseña una gran lección, porque a pesar de que son de diferente especie se apoyan mutuamente. “Algo que me encanta de los animales es que nos les importa el aspecto de los demás. A veces, sólo necesitamos un amigo”, comentó.

Los usuarios de redes sociales consideraron que Possum y Kangaroo hacen una gran mancuerna, porque su pelaje es del mismo color. Cuando un internauta le preguntó si los iba a dar en adopción juntos, la mujer aclaró que es muy probable que no, pero que aún hace falta mucho camino por recorrer.

“Es normal que los animales bebés quieran consuelo entre sí, pero eso no significa que estén unidad. Espero que vuelvan con sus respectivas camadas una vez que estén destetados”, concluyó la rescatas.