Ángel de Brito, antes de su debut en el “Cantando”: los recaudos por el coronavirus, las reglas “sorpresa” y la química con Laurita Fernández

Cuando brindó por la llegada del 2020, Ángel de Brito no podía siquiera imaginar que, meses más tarde, iba a tener sobre sus hombros la responsabilidad de liderar el horario central de El Trece. El conductor de Los Ángeles de la mañana es una de las figuras más destacadas de la emisora comandada por Adrián Suar. Pero, como es sabido, ese espacio estaba reservado para Marcelo Tinelli. Sin embargo, la pandemia del coronavirus cambió los planes de todos los argentinos. Y, a falta de un protocolo para poder poner al aire al Bailando, LaFlia decidió convocar al periodista para que se pusiera al frente del Cantando 2020, que arrancará este lunes a las 22:30.

—¿Cuáles son tus expectativas para este debut, teniendo en cuenta que vas a estar ocupando el horario de “ShowMatch”?

—Hace un mes que estamos trabajando en el programa. Bah, la producción ya venía trabajando de antes... Y la idea es divertir a la gente en este momento que hay tanta preocupación, para que pueda despejarse un poco. Para mí, es una gran oportunidad la que me están dando Marcelo y Adrián de estar en el horario más importante del canal, así que le voy a poner todo para que el certamen sea entretenido.

—¿Te sorprendió la convocatoria? Porque vos ya te estabas probando el traje de jurado para el “Bailando”…

—No estaba en mis planes, para nada. Pero estoy muy orgulloso de que me hayan llamado. Yo trabajo en la productora de Marcelo desde el 2003 y hace muchísimos años que estoy en el canal. Así que estoy muy contento. Además, es un formato nuevo para mí. Yo hice mucho reality desde el jurado, pero nunca me había tocado conducir uno hasta ahora.

—Vas a estar acompañado por Laurita Fernández, ¿cómo viene esa dupla?

—Nos llevamos bárbaro. Yo la conozco desde que entró al primer Bailando como soñadora y siempre tuvimos buena onda. Cuando empezó esta pandemia estuvimos charlando mucho, porque a los dos nos tocó volver de otro país justo en ese momento. Así que hablamos de la cuarentena, de lo que hacíamos, de las series que veíamos…

—De su separación de Nicolás Cabré...

—También. Pero desde hace muchos años tenemos charlas en privado. No somos amigos íntimos, pero tenemos mucha química. De hecho, hace tiempo veníamos diciendo que queríamos hacer algo juntos, porque habíamos trabajado bien en el Bailando y cuando ella estuvo como panelista en LAM. Así que era un deseo pendiente y se dio ahora, de casualidad.

—En un contexto extraño, ¿no?

—Sí. Ayer estuvimos ensayando por primera vez juntos, probando las luces y las cámaras en la pista. Todo con con barbijo, muy incómodo, pero siguiendo todos los protocolo que se van a ver en el programa.

—Imagino que no van a estar al aire con tapabocas, ¿cómo van a ser los cuidados que van a implementar?

—Obviamente, la conducción la vamos a hacer sin barbijo, pero lo vamos a usar hasta que arranque el programa. Y vamos a mantener la distancia social como corresponde. Tenemos alcohol en gel por todos lados. Y también hay un equipo que se va a encargar de desinfectar el estudio antes y después de cada emisión.

—Vos también tenés que tomar estos recaudos en tus otros trabajos, ¿cómo lo venís llevando?

—Estoy cumpliendo con un encierro bastante estricto. Salgo sólo para ir a LAM a la mañana, pero llego sobre el aire y ya vestido, maquillado y peinado desde mi casa. Y, apenas termino el programa, me voy. El ciclo de CNN Radio, El Espectador, lo estoy haciendo a través de una aplicación así que no voy al estudio. Y ahora arranco con el Cantando con el protocolo que te conté. Pero la mayor parte del tiempo estoy aislado.

—Está complicada la televisión por estos días…

—Es muy difícil porque, obviamente, la gente tiene miedo de ir a los programas. Se redujo el personal al mínimo de producción y de técnica. Y la mayoría de las notas son a través de aplicaciones. Pero tenemos que trabajar así porque es la única forma que tenemos de cuidarnos.

—Hay quienes siguen cuestionando que este tipo de programas no es esencial. ¿Vos qué pensás?

—Me parece que estamos en un momento distinto que lo que fue el principio de la pandemia, porque ya se está flexibilizando todo. La gran mayoría de los argentinos empezaron a trabajar y, muchos otros, lo van a hacer en las nuevas etapas. Y este es un programa que se ve en todo el territorio, además de Uruguay, Paraguay y otros países. No es solo para Capital Federal y alrededores. Obviamente, en el AMBA estamos más complicados, pero hay muchas provincias que ya avanzaron a otros estadíos. Y por las redes llegamos a todo el mundo. Así que no hay que pensarlo sólo como un entretenimiento local.

—¿Creés que la gente tiene la necesidad de ver algo que no esté ligado a las noticias del coronavirus?

—Nos pasa a todos. Al principio eran 24 horas de lo mismo y, en algún momento de esta cuarentena, nos empezamos a agotar. Entonces comenzamos a necesitar una ventana de diversión, de entretenimiento, de emoción. Y a todo eso vamos a apuntar en el Cantando. De hecho, Carmen va a abrir el ciclo con un tema de Sergio Denis, a quien le vamos a dedicar el programa. Y va a haber muchas sorpresas de ese tipo, porque los equipos van a tener libertad para jugar.

—Hablemos del jurado: Nacha Guevara, Moria Casán, Pepito Cibrián y Karina La princesita Tejeda. ¿Qué te parece?

—Creo que es un jurado de alto nivel. Son todos profesionales de la música y del medio en general. Moria es un placer de compañera y súper picante. Nacha es muy exigente y ya trabajé con ella en el Bailando. Para Pepito va a ser su debut en un jurado y me parece que va a dar mucho que hablar. Y Karina va a sorprender, porque todos piensan que es la buena pero también es muy estricta. Aunque la verdad es que nos vamos a empezar a conocer en estos roles a partir del lunes, porque no hubo reuniones previas como las que se hacen generalmente. Y tampoco hubo un ensayo del equipo completo.

—Estaría faltando la pata periodística que en el “Bailando” cubrían Marcelo Polino y vos. ¿Te vas a tener que hacer cargo de eso también?

—Yo voy a mantener mi esencia periodística. Mi rol es distinto porque como jurado me encargaba de hacer las preguntas más incómodas y, en este caso, voy a ser el anfitrión. Pero le voy a preguntar a los participantes, a los jurados, a Laurita y a todos, aunque siempre desde el rol de conductor. Y creo que la que va a tener un peso muy fuerte va a ser Moria, que además de figura es conductora, está al tanto de todo y no se le escapa ninguna a la hora de dar su devolución.

—Hablemos de los participantes: ¿quién pensás que se puede destacar este año?

—El elenco es buenísimo y hay de todo: desde Laura Novoa, que amo verla en un reality, hasta Carmen que ya tiene mucha experiencia. También hay participantes como Miguel Ángel Rodríguez, Jey Mammón o Adabel Guerrero que pasaron por el concurso. Y hay mucha gente nueva, algunos que vienen de las redes sociales, y van a sorprender. O sea que es muy variado, pero cada uno está por algo. Y lo importante es que las reglas las van a ir conociendo en vivo.

—¿Cómo es eso?

—Si bien se mantiene la dinámica de cualquier concurso, donde después de la participación hay una devolución, se van a ir enterando cómo es el sistema de puntaje y eliminación después de la primera ronda. Esos van a ser los condimentos del programa que, por ahora, solo conocemos la producción, el jurado y los conductores.

—¿Pensás que el ánimo está como para peleas o polémicas?

—Creo que puede pasar de todo. Porque, además, cantar te expone más que bailar. Cuando vos está haciendo una coreografía, si te olvidás un paso podés reemplazarlo por otro. Pero acá, si te confundís la letra fuiste. Y me parece que la música toca fibras más sensibles. Sobre todo, para los que trabajan en comedias musicales o se dedican al canto y tienen que recibir una devolución de pesos pesados como los cuatro que están en el jurado. Creo que van a llegar con un poco de susto.

—¿Cómo vas a hacer vos con un programa a la mañana, otro por la tarde y otro a la noche?

—En estos tiempos de encierro, el trabajo es un escape para todos. Es la posibilidad de salir y de hacer algo distinto. Y, para mí, además, es una pasión. Yo estoy acostumbrado a este ritmo porque el año pasado no hacía el Cantando pero estaba en el Bailando. Así que, más o menos, es la misma dinámica. Y me siento un privilegiado de estar en tantos proyectos.

—¿Crees que Tinelli va a volver a la pantalla este año?

—Sí. Suar dijo en una entrevista que quería que volviera el Bailando. Obviamente, depende de lo que vaya pasando, porque hoy no se puede planear ni para la semana que viene. Pero la intención está y el elenco también. De hecho, el programa estaba preparado para debutar en abril o mayo, lo que pasa es que se fue retrasando por la pandemia.

—Imagino que has hablando con Marcelo. ¿Cómo lo notaste con todo esto?

—Hablé mucho con él y está preocupado, como todos los argentinos, pero con muchas ganas de trabajar. Tinelli hace muchas cosas que, por ahí, no se ven en cámara. Pero quiere arrancar con el programa cuanto antes.

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