El viernes pasado, cuando caía la tarde, una camioneta Ford Eco Sport blanca frenó frente a la casa de Fabián Scoltore, histórico socio de Marcelo Tinelli, en San Isidro. Adentro del vehículo había cuatro delincuentes que ya habían marcado la vivienda. En cuestión de minutos tres de ellos ingresaron por la puerta trasera. Adentro estaba el empresario junto a su esposa. El robo fue violento porque Scoltore recibió al menos dos golpes de puño en la cara. El saldo del asalto fueron distintos objetos de valor pero, principalmente, relojes de alta gama.
Luego de 72 horas de investigación la justicia descubrió que detrás del asalto se escondía una banda dedicada a robar autos, cambiarles la patente y luego realizar entraderas. Uno de los asaltantes está detenido mientras que el resto sigue prófugo.
Según los datos que recolectó la fiscal Carolina Asprella, no fue un robo al voleo aunque los delincuentes tampoco sabían de quien se trataba. “Eligieron la casa por el aspecto nada más, se enteraron de quien era el propietario cuando estuvieron adentro”.
Una prueba de esto es la insólita situación que se vivió a los pocos segundos de comenzado el robo. Luego de golpear a Scoltore uno de los delincuentes lo reconoció y se emocionó. Tanto fue así que sacó su teléfono celular y llamó a un amigo. “Che, boludo, no sabés, me metí a la casa de un famoso y le estoy robando”, dijo según pudo reconstruir Infobae. Para certificar que era verdad le sacó una foto a la víctima y la envió.
Luego del asalto, los delincuentes escaparon y comenzó la investigación que estuvo comandada por la fiscal y fue ejecutada por la DDI de San Isidro.
Por las cámaras de seguridad municipales y privadas, se siguió el rastro de la camioneta en su huida. Efectivos de civil de la Policía Bonaerense la detectaron estacionada en un barrio de San Fernando.
“Cuando los policías ven la camioneta avisaron a la fiscalía y se dio orden de no hacer nada y esperar a ver quién se subía o que movimientos se realizaban con ella”, explica uno de los investigadores.
Algunas horas más tarde la estrategia dio resultado. Un hombre se subió al vehículo. Lo primero que llamó la atención es que tenía guantes puestos. “Estaba listo para pasar a buscar a sus compañeros e ir a robar nuevamente”, señalaron desde la fuerza policial. Lo cierto es que la fiscal Asprella dio la orden de detenerlo y de allanar la casa de la cual había salido.
Cuando los policías entraron al domicilio notaron que una mujer se escapaba por la parte trasera. Era la esposa del detenido.
La mujer fue perseguida por los efectivos hasta que a las pocas cuadras ingresó a otra vivienda. Era la de su padre. Ahí también se realizó un allanamiento. En ese lugar se encontraron distintos elementos de importancia pero, fundamentalmente, relojes de alta gama. Se comprobó que, al menos, uno era parte de lo robado a Scoltore.
El detenido es un delincuente con experiencia. Luego de la detención se chequearon sus registros donde figuran varios antecedentes por robo y otros delitos.
El siguiente paso de la investigación fue determinar a nombre de quien estaba la camioneta blanca utilizada en el asalto al socio de Tinelli. Ahí se descubrió que el vehículo había sido robado días antes pero algo no coincidía. La patente había sido cambiada. Era una Eco Sport blanca pero tenía puesta la chapa de un modelo negro.
“Evidentemente estamos ante una banda bastante bien organizada que se dedicaba a robar autos a mano armada, para después ponerles otra patente y con ese vehículo hacer entraderas”, explican desde la justicia.
Los otros ladrones que participaron del robo aún no fueron detenidos pero fuentes cercanas al expediente aseguran que la investigación está encaminada para detenerlos.
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