Distintos sectores del peronismo confluyen en un encuentro por la unidad

Con miras a las elecciones de 2019, el peronismo porteño, con su presidente Víctor Santa María, y el ex jefe de gabinete de Néstor y Cristina Kirchner, Alberto Fernández, encabezan un cónclave para poner en marcha un plan de unidad que reúne a representantes de los grandes grupos en los que está dividido el justicialismo. La cita es en la sede de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET), perteneciente al sindicato de encargados de edificios  (Suterh).

Del convite participan los dirigentes kirchneristas Agustín Rossi y Daniel Filmus, por el randazzismo, Fernando "Chino" Navarro y el propio Fernández. También hay referentes del Frente Renovador (Felipe Solá y  Daniel Arroyo), aunque sin representar a la fuerza que lidera Sergio Massa, sino que van por su cuenta; y el presidente del PJ bonaerense e intendente de Merlo, Gustavo Menéndez. Éste último, representante del ala "dialoguista" del peronismo bonaerense, podría ausentarse ya que se quebró una costilla. En su lugar iría Fernando Gray, intendente de Esteban Echeverría y número 2 en el PJ provincial. Además, se prevé la presencia de los jefes comunales de San Martín, Gabriel Katopodis, del Partido de la Costa, Juan Pablo De Jesús; de La Matanza, Verónica Magario.

"La idea es armar una agenda en común para construir, de a poco, la unidad opositora. De momento no es más que dialogar con todos los que quieren debatir", señaló Daniel Arroyo a Infobae.

Están presentes también dos gobernadores. Se trata de Alberto Rodríguez Saa, por San Luis, y Sergio Uñac, por San Juan.

La asistencia en el encuentro genera diferencias y rispideces al interior del massismo. El diputado nacional Marco Lavagna, que milita en las filas del ex intendente de Tigre, publicó días atrás en su cuenta de Twitter un mensaje para la interna peronista. "No formamos parte de esta mesa, creemos que en este momento es importante trabajar en los problemas de la gente y es lo que estamos haciendo", afirmó en la red de microblogging acerca del cónclave en la UMET. Antes, Sergio Massa había mostrado sus reparos ante una posible tentativa de confluir con Cristina Kirchner.

Desde el randazzismo, la diputada nacional Florencia Casamiquela que la jornada en "es el primer paso que estamos dando todos los sectores del peronismo con la intención de salir de esta encerrona" de la división, que concluyó en una contundente derrota del peronismo en los comicios legislativos del año pasado.

"La derrota genera dispersión. Ahora tenemos un desafío muy serio de cara al futuro. Tenemos que escuchar al movimiento obrero y a las organizaciones sociales, muy golpeados por un Gobierno que les da la espalda", consideró la representante parlamentaria. "La reunión de hoy es un buen síntoma. Tenemos que desterrar el dedo acusador y terminar con el peronómetro. Tenemos que barajar y dar de nuevo", sostuvo en diálogo con radio AM 750.

El encuentro, denominado "Argentina Unida – Desafíos en el fortalecimiento del campo popular", tendrá diez mesas de exposición. El listado de temas a tratar son "La calidad institucional de nuestra democracia"; "El presente económico y los desafíos del desarrollo"; "Educación, Ciencia y Tecnología"; "El presente de endeudamiento"; "Políticas de género"; "La construcción de una Argentina federal"; "La defensa del trabajo y la distribución de la riqueza"; "La Argentina en el contexto internacional"; "Juventud y el peronismo en el siglo XXI".

Aunque todos los dirigentes son cautos con sus expectativas, el objetivo último de estas mesas es claro. Evitar una nueva dispersión de los grupos peronistas en los próximos comicios y lograr un armado electoral competitivo capaz de pelearle a Cambiemos la Presidencia de la Nación en 2019. Pero además de la puja por la Casa Rosada, estarán  en juego la mayoría de las gobernaciones e intendencias. Una disputa que preocupa a todos los sectores opositores por igual.

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