La arquitecta Gina Chambi propuso la construcción de andenes en la Costa Verde como una medida adicional para reforzar la seguridad de los acantilados, en respuesta a los riesgos sísmicos que enfrenta la capital peruana. Según informó América Televisión, el reciente sismo de magnitud 6,1 que sacudió Lima y Callao el 15 de junio debe considerarse como un simulacro ante la inminencia de un terremoto de 8,8.
Chambi, quien preside la Comisión Nacional de Gestión de Riesgos de Desastres, enfatizó la necesidad de revisar las estrategias actuales de protección en la Costa Verde. La arquitecta señaló que las geomallas instaladas en los acantilados solo ofrecen una protección complementaria y no constituyen una solución definitiva frente a un evento sísmico de gran magnitud. “Hemos visto que es solo un complemento de protección. Hay que cambiar las mallas por vegetación”, declaró.
La especialista explicó que la vegetación puede desempeñar un papel más efectivo en la estabilización de los taludes, ya que las raíces de las plantas contribuyen a la cohesión del suelo y a la reducción de la erosión. La propuesta de Chambi incluye la sustitución progresiva de las geomallas por especies vegetales adecuadas para el entorno costero, lo que permitiría una mayor integración ambiental y una protección más sostenible a largo plazo.
Además, la presidenta de la Comisión Nacional de Gestión de Riesgos de Desastres sugirió la implementación de andenes en la Costa Verde. Esta medida, según detalló el medio, busca replicar técnicas ancestrales de ingeniería que han demostrado eficacia en la contención de suelos en zonas de pendiente pronunciada. La construcción de andenes podría reducir el riesgo de deslizamientos y mejorar la seguridad de las áreas urbanas y viales situadas al pie de los acantilados.
La preocupación por la seguridad en la Costa Verde se ha intensificado debido a la vulnerabilidad de los acantilados frente a movimientos telúricos. En caso de un sismo en la Costa Verde, se recomienda mantener la calma y buscar un área despejada, lejos de acantilados y estructuras inestables. Alejarse del mar ante el riesgo de tsunami y atender las señales de evacuación si las autoridades lo indican. Si se está en un vehículo, detenerse de manera segura, permanecer dentro y no estacionar cerca de puentes o muros. Evitar usar ascensores o acercarse a postes y cables. Seguir únicamente información oficial del IGP, INDECI o COEN, y contar con una mochila de emergencia preparada.
Rápida visita presidencial
La presidenta Dina Boluarte, acompañada de ministros, recorrió la Costa Verde después de los deslizamientos causados por el sismo de magnitud 6,1 que sacudió Lima y Callao el domingo por la mañana. El epicentro de este movimiento se ubicó a 30 kilómetros al suroeste del Callao, provocando caídas de rocas y tierra en varios puntos del circuito de playas y generando preocupación entre la ciudadanía, especialmente en zonas costeras.
Antes de inspeccionar las áreas afectadas, Boluarte acudió al Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) en Chorrillos, donde informó que no existía alerta de tsunami y pidió tranquilidad a la población. Recalcó la importancia de mantener la calma, protegerse de objetos que puedan quebrarse y esperar la intervención del Ejército para limpiar las vías bloqueadas por los deslizamientos. La presidenta también mencionó que se verificaba la información sobre una posible víctima en Independencia, tras la caída de una pared.
Las autoridades exhortaron a los ciudadanos a mantenerse informados solo por canales oficiales y a seguir las recomendaciones de Defensa Civil. Tras el movimiento principal, se detectó una réplica de magnitud 3,6. El monitoreo de la situación se mantuvo durante toda la jornada.