Pedro Castillo se ha mostrado en contra del juicio por rebelión que enfrenta y a modo de protesta inició una huelga de hambre el pasado 11 de marzo. Al conocerse que el expresidente sufre de gastritis crónica y lumbalgia, sus hijos enviaron una carta desde México, país donde residen desde el intento de golpe de Estado de 2022.
“Estamos profundamente orgullosos de tu valentía y firmeza al enfrentar las injusticias que has sufrido. La vacancia ilegítima, la detención arbitraria, la prisión injusta y el juicio que carece de toda imparcialidad”, se lee en el texto que fue escrito con estilos de caligrafía diferente.
Los hijos de Castillo expresaron su preocupación por la salud del detenido, señalaron la huelga de hambre como un “acto de protesta justa y valiente”, pero lo instaron a detenerla. “Te imploramos que, por amor a nosotros y a todos los que te necesitan, consideres suspenderla temporalmente. El pueblo peruano te necesita fuerte y sano para continuar liderando esta lucha por la justicia y la libertad”, escribieron.
“Por favor, padre, cuídate por nosotros. Sabemos que la batalla no ha terminado, pero necesitamos que estés bien para seguir adelante. Cuando sea necesario, estaremos contigo para reiniciar esta lucha, pero por ahora, te pedimos que te cuides”, agregaron Arnol Castillo y su hija menor de edad.
Pedro Castillo respondió a través de su cuenta de X asegurando que “tenemos la razón y somos fuertes”. Agradeció el mensaje y anunció que haría lo necesario para alcanzar la victoria. Como se sabe, el exmandatario pasó a llamar huelga de hambre seca a su manifestación. Desde el penal de Barbadillo, se confirmó que este había ingerido líquidos.
Juicio contra Pedro Castillo
Pedro Castillo, expresidente de Perú, enfrenta actualmente un juicio por su intento fallido de disolver el Congreso y reorganizar diversas instituciones del Estado el 7 de diciembre de 2022. Este acto, ampliamente considerado como un intento de golpe de Estado, llevó a su destitución y posterior arresto.
La Fiscalía ha acusado a Castillo de los delitos de rebelión, abuso de autoridad y perturbación de la tranquilidad pública, solicitando una pena de 34 años de prisión.
El juicio oral comenzó el 4 de marzo de 2025 en la Sala Penal Especial de la Corte Suprema, donde Castillo se declaró inocente, afirmando ser un “presidente constitucional secuestrado” y negando haber cometido delito de rebelión.
Además de Castillo, otros exfuncionarios de su gobierno, incluidos exministros y oficiales de la Policía Nacional, también están siendo procesados por su presunta participación en el intento de golpe de Estado. El tribunal ha admitido numerosas pruebas documentales, testimonios y peritajes que serán evaluados durante el proceso judicial.
Paralelamente, Castillo enfrenta investigaciones por presuntos delitos de corrupción, incluyendo organización criminal, tráfico de influencias y colusión agravada, relacionados con irregularidades en contratos públicos y promociones militares durante su mandato.
La Fiscalía de Perú ha solicitado una pena de 34 años de prisión para el expresidente Pedro Castillo, derivada de su intento fallido de disolver el Congreso y establecer un gobierno de excepción el 7 de diciembre de 2022. Los cargos presentados en su contra incluyen rebelión, abuso de autoridad y grave perturbación de la tranquilidad pública.