Un Merval a UD 4.000, ¿es posible?

Las crisis y el humor social negativo son fundamentales para crear pisos en el mercado, como sucedió en Argentina con el índice líder porteño durante la pandemia.

Las medidas económicas del gobierno de Milei, como la eliminación del déficit fiscal y la baja de la inflación, generan un clima económico esperanzador en Argentina (Reuters)

En diciembre de 2021 escribí una nota que hablaba sobre la oportunidad histórica que representaba el Índice Merval en 350 usd. Hoy, tres años después, vale 1500 usd (un 330% de suba) y el futuro es prometedor, con un objetivo de USD 4.000 que puede parecer escandaloso pero para nada descabellado.

Hay una frase en el mercado que versa que los pisos se forman durante la negatividad, desde noticias hasta el humor social, y más aún estos pisos suelen suceder exactamente en el peor momento de la crisis.

En Argentina pasó esto con un Merval en USD 224 en el inicio de la pandemia (sí, el día que se decretó la cuarentena) y desde allí no paró de subir, por supuesto con reiteradas correcciones pero siempre con una tendencia alcista intacta.

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En aquel entonces, 2021, la oportunidad de comprar los activos argentinos cotizando a esos valores era una chance histórica y de acuerdo al ciclo en el cual se encontraba el país (y la bolsa) las probabilidades de recuperación eran muy grandes.

Dicha recuperación tenía dos partes, la primera aquella que lleva a los activos a su promedio histórico (la famosa regresión a la media) el cual muchas veces no depende tanto del contexto o decisiones, sino del mercado buscando el valor promedio luego de excesos de oferta como en este caso. La segunda si ya requiere de ver reflejadas ciertas decisiones de fondo que permitan no solo sostener ese aumento en las cotizaciones sino validar las proyecciones sobre un futuro crecimiento.

La primera parte podemos considerarla como cumplida, con un Merval que recuperó toda la baja luego de la derrota de Macri en las PASO 2019 e incluso se acerca a su máximo histórico. Se suele hablar de driverless en estas etapas donde no hay noticias específicas de por qué suben los activos pero la recuperación es sostenida y genuina.

Y para seguir creciendo desde acá comienza a ser necesario plasmar las decisiones que ataquen los problemas de fondo y estructurales que tiene el país, aquellos que definen el rumbo de un mandato presidencial. En este sentido, las políticas llevadas a cabo por el gobierno de Javier Milei de la mano de su ministro de economía Toto Caputo no solo han sido las acertadas sino que han sorprendido a propios y extraños por el rápido éxito que tuvieron.

Entre algunas de esas medidas podemos mencionar la eliminación del déficit fiscal (la madre de todos los males), la calma del dólar (el termómetro de un país como Argentina) y la más importante, la baja de la inflación (evitando un hiper que estaba a la vuelta de la esquina). Todo esto sumado al perfil de un gobierno que aboga por más libertad y menos restricciones, hacen pensar que el futuro, después de muchos años, es esperanzador en Argentina.

Yendo al título de esta nota, con un Índice Merval cerca de máximos históricos, entramos en precios que nunca se han pisado y como tal es fundamental la proyección técnica para tener una idea de hasta dónde podría llegar la cotización y en base a ello tomar las mejores decisiones de inversión.

El gráfico analizado en la cuenta de Twitter (X) @Merval_Surf (cuenta de quien escribe esta nota) es el Índice MERVAL medido en dólar contado con liquidación (tomando la cotización de la acción de YPF como referencia) y por la figura técnica de piso redondeado nos da un objetivo de USD 4.000 como se muestra a continuación:

Y claro que un Merval en USD 4.000 puede resultar escandaloso pero porcentualmente implica una suba de 288% desde el momento en que se publicó este análisis en Twitter (X) y desde los precios actuales un 163%, porcentajes que para un mercado como el argentino no son para nada descabellados.

Un dato a sumar es la temporalidad, es decir cuánto tardará en cumplirse el objetivo. Y si consideramos que la recuperación desde el piso hasta la resistencia (marcada en blanco en los USD 1.000) tardó 4 años, tenemos un primer parámetro de que nuestro target de 4K como mínimo tenga ese plazo de tiempo, es decir, llegando al final del mandato de Milei.

Si llegamos hasta los valores del mejor momento del índice (su all time high) con una economía que de a poco comienza a salir de las restricciones y el estancamiento, si las políticas económicas adoptadas por el gobierno tienen éxito, este objetivo es realista y alcanzable. Y un Merval en USD 4.000 implica que al país y los argentinos les estará yendo muy bien.

Este tipo de reversiones se suelen dar con cambios de épocas en los distintos países donde acontecen y Argentina no será la excepción a la regla. El futuro es prometedor y así lo viene reflejando el índice bursátil de nuestro país, uno de los mejores indicadores a mirar cuando se quiere dilucidar hacia dónde va una nación.

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