El fallecimiento de Abraham Quintanilla, el padre de Selena Quintanilla, ha generado conmoción entre seguidores y figuras de la música.
Reconocido por haber sido el impulsor de la carrera de la llamada Reina del Tex-Mex, Abraham Quintanilla deja una huella profunda en el mundo del espectáculo.
La noticia fue confirmada hoy por su hijo, el músico A.B. Quintanilla, a través de un mensaje en redes sociales: “Con el corazón destrozado les hago saber que mi padre falleció hoy”.
Su partida revive momentos claves de la familia Quintanilla y la historia de Selena, especialmente por su presencia constante en la vida y trayectoria de la artista, y su papel fundamental tras la trágica muerte de su hija en 1995.
“Veré a Selena otra vez”: la fe que sostuvo a Abraham Quintanilla tras la muerte de su hija
Poco después del asesinato de Selena, Abraham Quintanilla concedió una entrevista en la que habló abiertamente del dolor de perder a su hija y del sostén que encontró en la fe.
Ante la pregunta de Mauricio Zeilic sobre cómo lograban él y su esposa sobrellevar la pérdida, respondió:
“En nuestro creador. Nosotros, igual que Selena, teníamos mucha fe en la resurrección. Yo pienso, creo que en el futuro la vamos a ver otra vez”.
Durante la charla, el patriarca de los Quintanilla también compartió la magnitud del apoyo recibido.
“Les quiero dar las gracias a todo el público que nos han apoyado en este tiempo difícil para nosotros”, expresó, conmovido por las muestras de cariño de fans y colegas de diferentes países.
Su testimonio reveló la fortaleza que encontró en la espiritualidad y en el recuerdo de su hija, a la que definió como una persona:“genuina, simple de mente y amable”.
Pidió que la figura de Selena fuera recordada no solo como ídolo, sino también desde su esencia: “Nuestra familia quisiera que no consideraran a Selena como un ídolo, sino como una persona que amaba a la gente”.
El legado de Abraham Quintanilla y el adiós definitivo
El deceso de Abraham Quintanilla representa el cierre de un ciclo para la dinastía musical más influyente del género tejano. Dedicó gran parte de su vida a impulsar los sueños de sus hijos y resguardar la memoria e imagen de Selena tras su muerte.
Con su partida, familiares y admiradores evocan la fortaleza con la que enfrentó la tragedia de perder a su hija y la fe que manifestó públicamente:“En el futuro la vamos a ver otra vez”.
El recuerdo de Abraham persiste no solo por su labor como mánager, sino también por sus palabras llenas de amor paternal y esperanza.
El mundo hispano revive hoy la memoria de una familia marcada por el talento y la adversidad, y despide a un hombre cuya historia queda unida para siempre con la de Selena Quintanilla.