Un accidente doméstico que pudo terminar en tragedia conmovió a miles de usuarios en redes sociales, luego de que un perro cayera desde la azotea de su casa tras quedarse dormido y, por fortuna, sobreviviera al impacto al aterrizar sobre el parabrisas del auto de sus propios dueños. El incidente fue registrado en video por Wendy Rivera, dueña del animal, y rápidamente se viralizó por la naturaleza del accidente y la controversia que generó.
En el video, publicado por la propia Wendy, se observa cómo el canino, recostado en la orilla del techo sin protección alguna, se mueve por inercia mientras duerme, hasta que repentinamente cae al vacío. El momento fue musicalizado por Rivera con el popular audio “Se va a caer, se va a caer” de La Burrita Burrona, lo que provocó una ola de indignación entre los internautas.
De inmediato, los comentarios de usuarios en TikTok, Instagram y Facebook criticaron duramente la actitud de la dueña, señalando que la situación no era motivo de burla ni de tendencia. “Los perros no van en la azotea, el accidente pudo ser mortal y NO ES GRACIOSO”; “a nosotros qué nos importa el carro, queremos saber cómo está el perrito”; “esa casa es un peligro de todos lados”; “eso es un delito”, fueron solo algunos de los cientos de mensajes que se pueden leer en la publicación.
Diversos usuarios reclamaron la falta de barandales o medidas de seguridad en la azotea donde el perro descansaba. También cuestionaron la intención de la dueña al publicar el video, considerando que se trató de un acto de negligencia y no de un momento anecdótico. La polémica se intensificó ante la falta de una declaración oficial sobre la salud del animal, lo que llevó a muchos a asumir lo peor.
Sin embargo, horas después, la propia Wendy Rivera compartió dos nuevos videos en los que se ve al perro caminando, jugando y aparentemente sin lesiones graves, lo que calmó parcialmente la preocupación de los usuarios. Aun así, las críticas continuaron, principalmente centradas en la falta de precaución al permitir que el animal estuviera solo en una azotea sin barandas, y en el tono burlón del video original.
Este tipo de casos no son aislados. Expertos en bienestar animal han reiterado en numerosas ocasiones que dejar a perros en azoteas, sobre todo sin vigilancia y sin medidas de seguridad, representa un grave riesgo para su integridad física y emocional. La ley en varias entidades del país contempla sanciones para quienes mantengan a sus mascotas en condiciones que los pongan en peligro.
Aunque el perro en este caso sobrevivió, el incidente ha reavivado el debate sobre la responsabilidad de los dueños y la normalización de prácticas que podrían terminar en tragedias.