De la CDMX directo a Comala, esta es la colonia chilanga donde Juan Rulfo escribió Pedro Páramo

El mundo de Pedro Páramo fue plasmado sobre papel y tinta desde una discreta casa situada en la Ciudad de México

Guardar

Nuevo

En 1955, salió a la luz su novela más reconocida, "Pedro Páramo". FOTO: Especial
En 1955, salió a la luz su novela más reconocida, "Pedro Páramo". FOTO: Especial

Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo”, es la icónica frase con la que arranca una de una de las novelas mexicanas del realismo mágico con mayor fama internacional y la cual consagró a Juan Rulfo como uno de los grandes escritores latinoamericanos.

Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno nació el 16 de mayo de 1918 en Sayula, Jalisco. Además de escritor, destacó como guionista y fotógrafo. No obstante, la recreación fantástica de un pueblo del occidente mexicano le valió traducciones al alemán, sueco, inglés, francés, italiano, polaco, noruego y finlandés.

Tal como sucedió con Cien Años de Soledad, del colombiano Gabriel García Márquez, el mundo de Pedro Páramo fue plasmado sobre papel y tinta desde una discreta casa situada en la Ciudad de México, particularmente en el número 84 de la calle Río Tigris, en la colonia Cuauhtémoc.

“Le gustaba mucho agarrarse de las ramas de los árboles de la colonia Cuauhtémoc. Después cuando se hizo famoso, caminaba por las calles de Tíber, de Duero, de Ganges, Nazas y Guadalquivir. No se le veía por ningún lado la tristeza. Así caminaba Rulfo, platique y platique por los ríos de la colonia Cuauhtémoc”, recordaba Poniatowska.

Después de casarse con clara Aparicio, el autor se mudó a un departamento en la colonia Cuauhtémoc. FOTO: Google maps
Después de casarse con clara Aparicio, el autor se mudó a un departamento en la colonia Cuauhtémoc. FOTO: Google maps

El autor originario de Jalisco se mudó a esa vivienda en el corazón de la capital mexicana después de contraer matrimonio con quien fue el amor de su vida: Clara Aparicio, a quien dedicó una extensa correspondencia que más tarde fue reunida en una destacada obra epistolar.

Esa famosa casa, que también habitó el escritor Emannuel Carballo, fue punto de encuentro de otros reconocidos autores como Juan José Arreola, Vicente Leñero y Elena Poniatowska.

Su obra cumbre, Pedro Páramo recibió el reconocimiento de figuras de la talla de Jorge Luis Borges, Susan Sontag y Gabriel García Márquez.

“La novela de Rulfo no es sólo una de las obras maestras de la literatura mundial del siglo XX, sino uno de los libros más influyentes de este mismo siglo”, aseguró la galardonada escritora norteamericana, Susan Sontag.

Juan Rulfo no pudo acudir a recibir el premio Príncipe de Asturias porque no le dieron permiso en su trabajo 
Foto:
Especial
Juan Rulfo no pudo acudir a recibir el premio Príncipe de Asturias porque no le dieron permiso en su trabajo Foto: Especial

El camino de Juan Rulfo

Juan Rulfo dividió su infancia entre su pueblo natal y San Gabriel (hoy Venustiano Carranza). En 1933, intentó ingresar a la Universidad de Guadalajara, pero al estar en huelga, se trasladó a Ciudad de México. Asistió como oyente al Colegio de San Ildefonso, y en 1934, comenzó a escribir y colaborar en la revista América.

Entre 1936 y 1946, trabajó como archivista y agente de inmigración. A partir de 1946, se dedicó a la fotografía, y entre 1946 y 1952, laboró para Goodrich-Euzkadi como agente viajero. Entre 1954 y 1957, colaboró con la Comisión del Papaloapan y fue editor en el Instituto Nacional Indigenista en Ciudad de México.

En 1976, la revista ¡Siempre! incluyó dos textos inéditos de Rulfo: "El despojo" y "La fórmula secreta". FOTO: (Twitter)
En 1976, la revista ¡Siempre! incluyó dos textos inéditos de Rulfo: "El despojo" y "La fórmula secreta". FOTO: (Twitter)

En 1945, Rulfo publicó los cuentos “Nos han dado la tierra” y “Macario” en la revista Pan en Guadalajara. Establecido en Ciudad de México en 1946, volvió a publicar “Macario” en la revista América. En los años siguientes, publicó otros relatos destacados como “La cuesta de las comadres” en 1948 y “Talpa” y “El llano en llamas” en 1950. En 1951, la revista América publicó su cuento “¡Diles que no me maten!” y, en 1953, el Fondo de Cultura Económica integró “El llano en llamas” en la colección Letras Mexicanas.

En 1955, se publicó su novela más reconocida, Pedro Páramo, considerada una de las mejores de las literaturas en lengua española, y traducida a varios idiomas. Tras su lanzamiento, Rulfo no volvió a publicar más libros, aunque ocasionalmente algunos de sus textos aparecían en publicaciones literarias.

En 1959, la Revista Mexicana de Literatura publicó el fragmento “Un pedazo de noche”. En 1976, la revista ¡Siempre! incluyó dos textos inéditos de Rulfo: una narración titulada “El despojo” y el poema “La fórmula secreta”.

Rulfo recibió el Premio ‘Xavier Villaurrutia’ en 1956 por “Pedro Páramo”. En 1974, viajó a Europa para participar en el Congreso de Estudiantes de la Universidad de Varsovia, y fue invitado a formar parte de la comitiva presidencial en Alemania, Checoslovaquia, Austria y Francia.

El 9 de julio de 1976, fue elegido miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, tomando posesión de su silla el 25 de septiembre de 1980. En 1983, Juan Rulfo ganó el Premio ‘Príncipe de Asturias’ de España.

Guardar

Nuevo